Pequeñas historias.

Eres un sueño

¿Y qué pasaría si te digo que todo lo que vivo contigo es como un hermoso sueño?

Tú eres la persona perfecta para mí.

Nos complementamos mágicamente.

El brillo de tus ojos que alumbra nuestras caricias, y me hacen desearte más y más.

Eres la mejor persona que conocí en toda mi vida y realmente espero que te quedes en ella para siempre.

La mayoría de las noches que me desvelo, es pensando en ti. En tus ojos, tu profunda mirada. En tu boca, tu hermosa sonrisa. En tu mente, tu bella, complicada, inteligente, completa y talentosa mente.

Te digo una y otra vez que eres una persona hermosa, pero siempre olvido decirte lo mucho que lo eres en tu interior. Tu bondad, tu cariño, tu amor infinito, tu inteligencia y tus graciosas ocurrencias. No te cambiaría por nada. ¿De verdad no eres un sueño?

Y la verdad, me parece bastante importante el que te esté pensando día y noche, porque cuando no te estoy recordando, te estoy soñando, porque eres un sueño para mí.

Eres la lucecita en mi camino, la felicidad en mi tristeza, el pedacito que llena mi vacío. ¿Y si eres solo un sueño?

Me gustan: tus labios, tus besos dulces llenos de amor, las cartas que me dejas en mi mochila de vez en cuando, los fuertes abrazos que me regalas, tu atención constante que siento que no merezco. Me gustas completamente.

Me gusta que duermas a mi lado, como lo estás haciendo ahora.

Despierto.

Lo eras.