En uno de los suburbios de Manhattan, Estados Unidos vivo yo; mi nombre… Ally Limphord, vivo en un apartamento que apenas puedo pagar y con un trabajo del cual no me enorgullezco... soy prostituta. Tengo 21 años y vivo sola, mi madre nunca supe quien fue y mi padre murió cuando apenas tenía 12, me quede con mis tíos hasta los 18, y no me criaron muy bien que se diga. Mi tío abusaba sexualmente de mí y quede embarazada de el a los 15, mi tía me echo de la casa, porque según ella yo lo busque a él, que asco! En cuanto a mi embarazo, no lo tuve, aborte yo era una chiquilla y sin trabajo y casa no podía criar a un bebe, vague por las calles hasta que una señora demasiado anciana me recogió y sabía que yo no podría criarlo, ella me comprendió y me ayudo a sacarlo, no llevaba ni un mes de embarazada así que él no sufrió nada, me dio de beber una cosa rara y amarga y al día siguiente, tuve una menstruación repentina que duro lo general, como no tenía dinero ella me vendió con una señora de mayor edad pero no tanto como la anciana y esta me prostituyo hasta ayer, mi primer día de trabajo no tuve problemas, había perdido mi virginidad con un tipo y me daba lo mismo hacerlo con alguien desconocido, tuve sexo con un alcalde creo, y pago muy bien, pago demasiado bien que me saldo la deuda con la anciana y pago la mitad de mi deuda con la doña.
Es temprano por la mañana y no tengo ni mierda que hacer, y como trabajo de noche no me queda de otra, cobro de 1500$ en adelante y depende del cliente, bueno exagere con lo de que apenas podía pagar el apartamento, soy drogadicta y una alcohólica, no consumo mucho, solo de vez en cuando pero cuando lo hago he exagerado pero no hasta al punto de intoxicarme, decidí buscar en el periódico algún local donde trabajar pero no hay nada que me interese, cobro bastante bien por mis servicios, me ejército, soy blanca, pelirroja teñido, ojos verdes, y alta. Me encanta ir a los bares y discotecas, mis clientes frecuentes van desde empresarios multimillonarios hasta los más diplomáticos y conocidos políticos corruptos de mierda entre otros. Tengo pensado ir a la universidad, quiero estudiar fotografía, me gusta el paisajismo y el nudismo, fotografía en general... Pagan bien por esto y más en Hollywood y Los Ángeles. Voy a mi lap y busco con google una universidad que vaya con lo que busco y veo una que está muy cerca de donde vivo, no es muy cara y la carrera no toma más de 3 años y medio, anoto la dirección y voy a la ducha a darme un baño rápido, agarro unos vaqueros ajustados color negro, y un corset de encaje morado con encaje negro y una chamarra de cuero a juego con los vaqueros y unos tacones color negro con perlitas y una cartera de color morado no muy llamativo, agarro las llaves del depa y de mi auto un Ferrari 599 GTB Fiorano color negro, conduje lo más rápido que pude hacia la universidad. Al llegar fui a la recepción donde se hallaba detrás del mostrador una señora como de 50 años y en su cara era evidente que llevaba ahí un siglo.
-hola-sonrió hipócritamente, se notaba que odiaba estar en este lugar
- que quieres – me mira de arriba hacia abajo examinándome por completo, si soy una puta cual es el problema
-quiero saber, que tengo que hacer para entrar a la carrera de fotografía- la miro indiferente
-tiene que ir a la dirección, a hablar con el director, ¿tiene cita?- arquea una ceja, esta anciana me está jodiendo la paciencia.
- no, lamentablemente, quería averiguar primero que tenía que hacer- la miro y sonrió
- el director está libre a las 2 de la tarde puede venir si desea- mira el computador. Pero que rayos a las 2 de la tarde apenas son las 10 de la mañana, creo que tendré tiempo de buscar mis papeles al depa.
-está bien, estaré aquí a las 1:30 a más tardar, por favor aparte el horario- sonríe escéptica
-con gusto, ¿cuál es su nombre?- me examina de nuevo
- Ally Limphord- sonrío al recordar que mi padre me llamaba para salir al parque a jugar ¡Ally Limphord, palomitas y parque! Y yo salía corriendo hacia el para que me colocara los tennis rápidamente para ir a jugar, fue un tiempo donde creo haber sido feliz. La señora me extiende un papel con la cita marcada y procedo a retirarme al auto en busca de mis documentos sin antes pasar por el Starbucks en busca de un Frapuccino y un pastelillo de chocolate, suena mi teléfono y contesto
