Historias que me cuento...

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Iniciativas

Ella y Él / aventajados en aquella marea / vibraban / colapsaban sus bocas en un abismo de aire y furia / una caverna de agua caliente / Ella y Él / lacerados por el filo de la mesa / insinuados en la boca de los ausentes / los besos grandes de la gente chica / donde nunca somos nosotros / van quedando pedazos de un arpegio vago y hondo donde no llegan las góndolas / donde la única pérdida radica en el temblor de la mirada entre dos pares de ojos pasando por el charco de una vela consumida...

3

Desde entonces tus temblores fueron mis temblores, tus idas, tus venidas, tu humedad. Tuviste una manera única de inventarme. Quería olerte, destrozarte solo para mí, ya no podía parar de buscarte, de leerte, de ofrecer mi cuerpo de manos abiertas hacia ti.

Me contaste de los hombres que pasaron por tu vida, y por primera vez fuimos conscientes de la conexión que existía entre los dos.

Sintiendo

Voy con el corazón rodando de mano en mano / sin parar en ninguno

Voy con un corazón arrebatado lleno de pájaros cantores y de cuartos oscuros

Llego a tu lado con el corazón intacto que se va quedando en blanco

Un corazón que sabe a ti en cualquiera de sus lados

Miro esta tierra que me falta para alcanzarte / para llegar a tu boca a pedir otra historia / otro beso

La paz que necesito tanto.

Él.

4

No te conocía y aun habría abierto el cielo de la noche en dos tajos con mis manos tan solo para verte. Eras cualquier momento alegre, cualquier recuerdo bello y solo necesitaba uno de ellos para empezar a descifrarte.

- Quiero algo que no haya tenido nadie de ti. Le dije.

- Ya lo tienes. Mis historias nadie las ha tenido.

- Quiero probar algo que nadie haya probado.

- Y yo quiero algo que no hayan disfrutado todas. Quiero tenerte para mí un instante entre estos amores inconclusos, únicos y pasajeros.

- Quiero decirte algo en el oído, quiero un sabor de ti, toda la vida.

No paraba de imaginarte, de ponerte ojos y cabello como en el sueño. Desde el museo, no podía dejar de pensar en ti. Era esta una vida loca, era una vida que nos entre más nos unía más trabas ponía en nuestro camino.

Ambos decidimos saltar, el salto hacia el vacío, el vacío de no saber hacia dónde íbamos en caída libre, la caída con ella era simplemente aire, era tener una mano para poder saltar, el vacío se llenaba de ella, juntos empezamos este vuelo.

Lo que no sabíamos es que volar implicaba caer, éramos demasiado frágiles para cualquier impacto…

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⏰ Última actualización: Jul 30, 2014 ⏰

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