Nadia (2)

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Las mañanas eran alegres, era como levantarse sin cansancio, y ver el brillo hermoso del sol, todo colorido, sin ruidos y lo mejor era que pensaba en ella.

No tenía confusión, para mi estaba claro lo que ocurría, sabia que tenia que llegar a la escuela, abrazarla y besarla.

Madre: -¡Hijo!, para la escuela-.

El ir a la escuela no me apetecia mucho, pero, era la única forma de verla.

Yo: -Ok mama-.

Mientras me alistaba no dejaba de pensar en como seria verla, y me hacia preguntas como -¿La abrazo primero y después la beso?- o -¿La beso y después la abrazo?-, no era mi culpa, solo no dejaba de pensar en ella.

Le tenia una gran adicción al bus, me gustaba ir en él, ya que pasaba por sitios que me gustaba ver... Y entre la concentración que tenía me quede mirando a un hombre que vendía máscaras, me resultaban graciosas y me imaginaba con una de ellas...

-¡Hola!-, me dijo Nadia después de besarme. -¿Como estas?, dijo con una sonrisa hermosa.

Yo: -Estoy bien-, le dije sonriendo, -¿Y tu?-.

Nadia: -Bien, obviando la parte en la que no pude dormir-.

Yo: -¿Por que no pudiste dormir?-.

Nadia: -Es que no dejaba de pensar en ti-, me dijo mientras me miraba a los ojos-.

Me quede sin palabras, en ese momento no pensé mas que en que linda era, me sentía tan emocionado y perdido a la vez, era uno de esos momentos en los que te sientes a gusto con tu vida.

Yo: -¿Que pensabas de mí?-.

Nadia: -No se, solo pensaba en ti y en la suerte que tengo-.

Yo: -También pensé en ti-.

Sonrió.

Yo: -No tanto, porque pude dormir-.

Nos reímos juntos.

Nadia: -Estupido-.

Le Sonreí.

Nadia: -Ya llegamos-.

No quería llegar, quería seguir hablando con ella en ese mismo asiento, pero no nos podíamos quedar .

Al entrar al aula se sintió bien, no me importaba Brithani, solo me senté justo al lado de Nadia y conversamos tranquilamente.

Nadia: -¡Oye!, me sentare con Bri, en el almuerzo-.

Yo: -Esta bien-, le dije sin importarme.

No me importaba, solo la quería ver feliz, me sentía muy bien con ella, y quería que ella también. Y me senté a almorzar con Marc.

Marc: -¿Ya terminaron?-.

Yo: -No, solo quiere estar con sus amigas-.

Marc: -Aja-.

Yo: -Si, no ves-.

Marc: -Hermano, de seguro deben estar planeando su próximo plan-, dijo mientras reía.

Yo: -No, ya se disculparon, además ella no es así-.

Marc: -Amigo "Dime con quien andas y te diré como te ves"-.

Yo: -No es así-.

Marc: -Ese dicho si es cierto-.

Yo: -No, que no se dice así, es " Dime con quien andas y te diré quien eres-.

Marc: -Bueno, el punto es que te van a joder-.

Yo: -Ya te dije, no pasara-.

Marc: -Sueña hermano, sueña-.

Dueño de la SoledadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora