Faltaba solo media hora para terminar ya mi labor de trabajo. Estaba arreglando unos papeles que tenía en mi puesto para así terminar por completo mi trabajo e ir a la oficina de mi jefe.
- ¿Nos vamos, T/N? - Me preguntó mi amiga recostando sus brazos en el mesón de mi puesto.
- Lo siento, Sun. Hoy no me podré ir contigo - respondí ya arreglando un poco mi falda.
- ¿Por qué? - me miró - ¿tienes planes con tu padre?.
- No, Namjoon me invitó a cenar - le revelé con una sonrisa.
- Es broma, ¿cierto? - Habló sorprendida.
- Eso pensé, pero no, dentro de un rato vendrá por mi - le comenté entusiasmada.
- ¡Que emoción!- medio gritó - tendrás una cita con Namjoon - me sonrió sincera.
- Siento que mi corazón se saldrá en cualquier momento de mi pecho, Sun, realmente anhelaba con esto y por fin está pasando... Bueno, no es una cita, pero si una cena de amigos, por algo se empieza ¿no? - hablé como una niña enamorada.
- Claro que si, amiga, ya veras que muy pronto ustedes dos estarán juntos - me miró picarona - Eso si, yo seré la madrina de bodas y de tus hijos, me entendiste - Me señaló con su dedo índice advirtiéndome.
Reí - No nos apresuremos, Sun, por ahora solo tengo que rezar porque no diga o haga alguna tontería en la cena y salga huyendo de mi.
- No seas negativa, ya verás que todo saldrá bien y muy pronto olerá a boda - dió unos cuantos aplausos, se le notaba lo feliz por mi.
- Ay Sun, nunca cambias - solté una risita.
- Pero aun así me amas - me miró picarona guiñandome un ojo.
- ¿Aún no es tarde para arrepentirme? - pregunté seria, bromeando.
- Ja. Muy graciosa - Se cruzó de brazos.
- Sabes que te quiero, Sun - le sonreí, cariñosa.
- Eso lo sé - dijo egocéntrica - ¿quién no me querría? - hecho su cabello para atrás en pose diva. Esta mujer no cambia.
- Tan egocéntrica me salió esta mujer - Negué con la cabeza.
- O sea, bebé - estiró un poco su mano derecha y empezó a verse las uñas - ja ni yo me la creo, eso no es lo mío - Rió.
- Te estabas demorando, me cuesta creerte cada ves que te veo toda seria y amargada que hasta das miedo - Puse cara de horror - tú y el sr Jeon, son tal para cual... Por cierto, ¿cómo vas con él? - le pregunté levantando mis cejas varias veces con una sonrisa de lado.
Chasqueó la lengua - No me gusta ser así, ni mucho menos demostrar miedo a las personas, pero es que me someto tanto al trabajo que hay veces que ni yo me reconozco - Habló con la voz cansada.
- Te entiendo un poco, el trabajo cansa mucho - suspiré.
- Sí, estoy que me voy de acá y me tiro a mi cama para dormir hasta el otro año - reímos las dos ante aquel comentario - y con Jungkook tal vez hay veces que nos parezcamos y seamos compatibles pero no es mi tipo - rodó los ojos - y nuestra relación - hizo comillas en esa última parte - de... tú ya sabes de qué, la verdad me gusta pero me estoy aburriendo ya que solo nos buscamos para pasar un buen rato, que es realmente un buen rato, pero yo la verdad quiero conocer a personas diferentes y no aferrarme solo a Jungkook.
- Wow Sun, nadie creería lo que acabas de decir - Dije alzando mis dos cejas en gesto de asombro.
- Lo sé, pero es la verdad - Bufó - bueno, mejor olvidemos eso y ven que te arreglaré un poco para tu cita.