Una diabla { Duki }

#43

—No estoy abandonando si no que puedo hacerlo hasta los tres meses dijo la doctora Omar

—Si, Entendí, En los shows que vienen vamos a tener una enfermera por las dudas, Leí lo que tenés que empezar a comer, No tantas porquerías, Te voy a cuidar, Lo sabes — dijo abrazándome

Salí de su oficina y me encontré con Ignacio, Ya todos lo sabían pero el de alguna manera estaba dolido

—Vas a seguir enojado?

—No estoy enojado, No puedo, Me duele que no puedo vivir el embarazo con mí mejor amiga, Ya ni voy a visitarte porque estás con él viviendo

—Sabes que podrías solucionarlo, No?

—El también podría

—Tampoco quiero que estés lejos de esta etapa porque estuviste para mí en muchas, Voy a hablarlo

—Sabes que me llamas y estoy al toque

—Gracias Nachito — dije besando su mejilla

Subí a mí auto y mira el asiento de acompañante, Tenía la carpeta con la foto de la ecografía para Mauro quien hace un rato llego de gira
Este mes fue intenso  y todo lo que implica tener un bebé dentro de mí panza empezaba a notarse en mí
Maneje unos 15 minutos hasta lograr llegar a el departamento
Al estacionar note que tenia varios wsp de Mauro informándome que estaba en el lugar y haciéndome preguntas sobre cómo estoy..

Al entrar marque el piso en el ascensor y caminé hasta el fondo del pasillo
Ingrese la llave y me encontré con Mauro tirado en el sillón viendo tele

—¿Me extrañaste?— dijo levantándose y abrazándome

—Muchisimo

—¿Como está el porotito o porotita? — dijo tocando mí panza — Extraño dormir con papá estos 5 días ?

—No es más fácil decir BEBÉ antes que porotitos?

—Mi mamá dice poroto a todo bebé que no sabe que va a ser

—Es que, Poroto — dije haciendo cara de asco — Decile lenteja — dije y Mauro tapo su cara riendo

Le di la carpeta que tenía en la mano al abrirla sonrió y sus ojos estaban tristes

—Primer ecografía y no pude ir — dijo sentándose mientras la miraba

—Bueno pero fue por trabajo y aparte van a haber muchas más

—¿Fuiste sola?

—No, Candela y tu mamá estaban conmigo — dije y sonrió

—En serio?

—Y tu hermano se quedó afuera porque eramos multitud

—Que genios — dijo sonriendo