La galaxia en tus ojos

Capítulo 3

Ni tu peor enemigo puede hacerte tanto daño como tus propios pensamientos.

Desperté completamente anonadado, lo último que recordaba era a un tipo con una pistola, mire a mí alrededor, estaba en un lugar completamente extraño, jamás había estado ahí, era parecido a un centro de investigación, bastante alto y grande, parecía una casa, enorme. En el centro había una especie de ascensor o transportador de partículas y alrededor tres pisos,  y yo estaba en el primero, al frente mío había un lugar que parecía ser la parte que controlaba esta cosa, y la segunda habitación contigua a mi celda estaba llena de armas que nunca había visto, era un lugar enorme. 

Mi celda tenía una cama y una silla y un inodoro, estaba encerrado allí como un vulgar preso, lo peor era que desde allí no se podía ver el cielo, era horrible.

Tenia que salir de ahí como sea, pero este parecía ser un lugar muy seguro, seria difícil escapar, hubiera tomado el transportador de partículas pero esas cosas estaban conectadas en un circuito, había una de ellas en mi casa, pero estas cosas funcionan como los ascensores; deben estar en un mismo edificio para poder transportar a la gente de un lugar a otro, esto es por privacidad, imagínense ustedes que de repente apareciera en su casa un tipo de otra parte del mundo... en fin.

Estaba observando estas cosas, cuando sentí los pasos de algo... o alguien, se acercaban, simplemente me hice al dormido, me daba miedo. Escuche que la voz de esa persona, era una mujer.

- ¡sigue dormido!

Gritó aquella voz y hubo otra que parecía de una persona mayor que contestó:

- Que raro debería de haber despertado ya, esa dosis no es muy fuerte... tal vez es un debilucho, pero tenemos uno... no pude alcanzar a nadie mas, en cuanto salí... no pude hacer mas - no lo podía creer este tipo me secuestró me dijo debilucho cual era su problema yo era un nerd pero uno que se ejercitaba de vez en cuando... y además quería secuestrar a otros mas, pero yo no lo iba a permitir iba a detener a aquel tipo, salvaría a la humanidad no iba a dejar que dijera esas cosas de mi, eso es lo que iba a hacer.

- No es tu culpa, no pudimos cumplir nuestros propósitos, pero lo tenemos a el la verdad se ve bastante fuerte y sano no creo que sea un debilucho, creo que con eso basta, corriste mucho riesgo al salir del refugio ¿estas seguro de que nadie te vio?-esa señora si me caía bien, pero aun así debía hacer algo.

-Si, es seguro que sea subterráneo, pero aun así tengo miedo de que nos descubran... y que además de eso lo tengamos que esconder por que por lo que puedo ver no creo que sepa manejar armas - no sabia con quien se metía, le iba a dar una lección, ese tipo no sabía que yo había intentado armar una escopeta casi funcional en mi infancia.

- Yo también amor, pero es lo mejor que pudiste hacer- se escucho un beso, escuche los pasos alejándose, se dejo de escuchar ruido, me senté y comencé a sacar conclusiones.

Por lo que había escuchado estos tipos estaban huyendo, de seguro eran locos que andaban secuestrando gente y huían de la policía ¿y eso de que solo me tenían a mí? ¿Y de que no pudieron cumplir sus propósitos y que conmigo bastaba? Creo que esto era un plan para hacer un experimento conmigo y por eso tenían miedo de que los descubran, además querían que aprenda a manejar armas, tal vez quería conquistar el mundo como los científicos locos, pero no dejaría que violen mi integridad, lo bueno era que gracias a mi sigilad sabía dos cosas.

1. Sabía que estaba bajo tierra, así que sabía como debía salir.

2. Sabía sus intenciones y debía actuar con cautela, mi plan era salir y decirles a todos las intenciones de esos pillos.

- ¡¡¡¡¡¡YA DESPERTÓ!!!!!! – Ese grito interrumpió mis pensamientos y casi me da un paro cardíaco, era una voz chillona como de una adolescente, se escuchaba como una de las animadoras del equipo de fútbol.- hola ¿Cuál es tu nombre?

- Mi nombre es Axel Atteberry- dije en tono serio.

-Axel ehh...- dijo analizándome con la mirada poniéndome nervioso, odiaba el contacto visual, pero hice el esfuerzo de mirarla a los ojos, los tenía de color café oscuro, eran grandes, y contrastaban con su despeinada cabellera, la que le llegaba hasta media espalda- bonito nombre, yo soy Amaris mucho gusto - dijo estrechando sus manos una con la otra desde el exterior de la celda, se estaba burlando de mi habría querido vengarme pero solo hice un gesto sin gracia y me di la vuelta.

La aparición de esta chica me había des concentrado, ¿seria cómplice o victima?, tal vez ya estaba genéticamente modificada para hacer... sea lo que sea que planeaban,¿tal vez debía salvarla, era mi deber... supongo.

-De todos los chicos de este planeta tenías que traer al mas aburrido y callado, yo quería un compañero de juegos - dijo cruzando los brazos molesta sacándome de mis pensamientos.

¡Valgame! que personas mas exigentes uno me decía debilucho y la otra aburrido, la señora seguía siendo mi favorita, y Amaria... o como sea que se llame tendría que rescatarse sola ahora, no podía decir eso de mi sin conocerme, pero que falta de respeto yo así no puedo. Tenía que trazar un plan. Iba a sacar información de esos criminales.

- Hija, esto es serio, no se trata de un juego y tu lo sabes muy bien.

- Si papá, solo bromeaba... pero si que es aburrido.

Ahora ya sabía de donde había sacado lo criticona la chica esa, ¿cómo podía pedir que no bromee si el ya se había burlado de mi? Pfff adultos.

- ¿Cual es la razón para encerrarme aquí como a un animal? Digo, si se puede saber. - dije dándome la vuelta y usando la voz mas seria posible.

- Con el tiempo lo entenderás... y habrá bastante, pero te recomiendo no intentes huir es lo mas tonto que puedes hacer ahora, intentamos protegerte - dijo el hombre con el tono de un superheroe de película.

Pero yo no iba a caer en sus engaños, el solo estaba manipulando mi mente para que yo haga lo que el quiera pero eso no iba a pasar. Iba a salir de allí... por mi cielo estrellado y mi abuela que lo haría.

¡Hola!

Por si no se dieron cuenta este capítulo lo narra Axel no tenia pensado publicar pero por la insistencia de un amigo lo hice por cierto este capitulo va dedicado para el.

Atte.

Madai