León

Cementerio

Un número y un pago, a eso se reduce. Una ceremonia que no fue para el, fui la única con una vestimenta “alegre”, una remera naranja con Charizard, Charmeleon y Charmander, no llego a ver Pokémon, pero le gustaban los peluches y los videos que le mostraba, y le encantaban los colores brillantes. Negro, gris, todos con colores apagados, todos mostrando su dolor.
No es justo, mi hermano no lo puede demostrar, ya no le sale, a mí sólo me enoja, en el lugar donde pusieron su cuerpo, al cerrarlo, estaban las marcas de una placa y una cruz…  una tumba usada, eso es lo que vale para un cementerio, el valor que uno paga, y aún cuando esté sea mayor, el día en que el pago no se efectúe será desechado como basura para colocar a otro difunto.
A pocos espacios un lugar sin placa, sólo con el número y un cartel pegado que decía “atrasado con el pago”, a su alrededor había muchos espacios con ese cartel.
Y allí, subiendo la escalera, sé tenía una vista más general, una visión de cientos de tumbas, continuados por una “villa”, donde seguramente habrá más cuerpos sin vidas y más vidas a punto de desaparecer.
¿Para que esta ceremonia? ¿Para que esas flores que al cortarlas ya les diste sentencia de muerte? No lo sé, sólo se que mí mamá no fue, ella conservará el recuerdo de cuando reía y disfrutaba del chocolate, yo jamás pensaré en que estaba ahí, viendo cómo “jugaban” con su cuerpo durante la autopsia, siendo enterrado en soledad rodeado de dolor y sufrimiento, definitivamente esa no es la eternidad en la que está, no me importa que no sepa que o si hay algo después de la muerte, no le puede esperar una eternidad de dolor.
Ahora está el asunto de la placa, ¿Que frase se le puede escribir a alguien que no llego a disfrutar ni actuar? No sé, buscaré, pero no creo que nada haga justicia.
Aún así creo que ya seque mis ideas escribiendo aquí