CAP 2.- Chanyeol

10 2 0
                                    

Me apoyé en mi taquilla con los brazos cruzando, observando como mi mejor amigo contemplaba su mejilla en espejo. Apretaba los labios con fuerza para evitar reírme para evitar su furia, pero se estaba convirtiendo en una misión imposible. Pasado cinco segundos, el grupo al completo comenzó a carcajearte y no pude evitar seguirlos. Ignoramos cada mirada enfurecida que nos lanzó y continuamos broma tras broma, hasta que cerró la taquilla de un portazo y se giró para vernos uno a uno. Las risas se cortaron seguidas de ligeros carraspeos y nos enderezamos, fingiendo que estábamos mirando cualquier otra cosa.

— ¿Quieres que la mate? —Preguntó D.O con una de sus espeluznantes sonrisas—. ¿Por qué me miráis así? Nadie sabrá quién fue —Se encogió de hombros ante nuestras miradas de "¿Estás loco?".

— No, D.O, no es necesario —Contestó TOP con una sonrisa socarrona en su labios—. Yo me encargaré de ella, tenemos que dar buena impresión el primer día.

— ¿Cuándo hemos querido dar buena impresión? —Pregunté, guiñándole un ojo y rodeándole los hombros con el brazo—. Vamos, hagamos caso a nuestro líder y demostremos lo buenos chicos que somos.

Las risas volvieron a comenzar mientras nos dirigíamos a la cafetería, armando jaleo y sin preocuparnos por la multitud que nos seguía. Una chica me saludó con una sonrisa coqueta a la que respondí con un guiño, una promesa silenciosa de que la buscaría más tarda. No solía importarme con quien pasaba el rato, escogía al azar a quien se cruzase en mi camino y me dedicaba por entero a ella hasta que terminaba y buscaba a otra. Tenía la teoría de que cuanta más chicas entrasen en mi cama, menos posibilidades había de que se descubriese la verdad. Intenté no mirar hacia Wonho, consciente que vería la decepción dibujada en su rostro. Sin embargo, no podía arriesgarme, no podía ser como él.

— ¿Cuánto tiempo tardarás en conquistarla? —Le pregunté a TOP para no hundirme más en la miseria por seguir pensando en la gran falsa en la que vivía—. Por el bofetón que te has ganado, te doy dos meses.

— ¿Dos? Yo creo que va a ser duro, no lo conseguirá hasta después de Navidad —Contestó D.O, abriendo las puertas de la cafetería y dirigiendo a su grupo a una de las pocas mesas libres que quedaba.

— Te doy tres semanas, semental. Confío en tus dotes —Apostó Jimin, sacando veinte euros de su cartera dejándolos sobre la mesa.

Se desató el caos y comenzaron las apuestas, cada uno fue diciendo una cifra y se acordó que el ganador sería aquel que estuviese más cerca. TOP amenazó con cortarnos la lengua si seguíamos divirtiéndonos a su costa, pero como solía ser habitual en situaciones sin riesgo, lo ignoramos completamente. Una vez dejado atrás a la mujer que fue capaz de golpear a nuestro líder, hablamos de cualquier tema sin importancia, atiborrándonos de nuestro desayuno e ignorando a las chicas que suspiraban en nuestra dirección. Todo estaba yendo de maravilla para tratarse de un primer día en la universidad, no me gustaba. La tranquilidad me ponía nervioso, me hacía esperar a que una tormenta estallase, pendiente de cualquier detalle que pudiese ocasionar problemas.

Lo que nunca esperé, es que mi paz se viese interrumpida mientras iba al baño. Perdido en mis pensamientos sobre como se desarrollaría la reunión de esta tarde, no me di cuenta de que alguien salía al mismo tiempo que yo quería entrar. Chocamos de forma torpe, tratando de sostener al otro para que no cayese y acabando los dos en el suelo, uno encima del otro.

— Dios, lo siento —Murmuré, incorporándome un poco para poder ver a quien había golpeado el primer día. Salvo si me metía en una pelea, solía ser una persona muy tranquila y trataba de evitar cualquier tipo de accidente.

— No, lo siento yo. No estaba mirando por donde iba —Los ojos más hermosos que había visto nunca me miraron con intensidad, haciendo que me quedase sin palabras—. Esto... Perdona, ¿Te importaría levantarte?

Fake LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora