PRÓLOGO
Yo: ¿Mamá?...¡¿MAMÁ?! -gritaba desesperadamente. Llevaba una semana encerrada en su habitación sin saber nada de ella, aunque se que estaba ahí. Solía salir de vez en cuando para comer algo. Pero hoy notaba algo distinto, soledad se podría decir.
Yo: ¡¿Mamá, estas ahí?! -sin respuesta.
Tras varios gritos de sofoco, Arya decidió entrar en su habitación. La ira y el miedo la volvían loca.
Yo: ¿Cómo? ¿Dónde estás?...Dejate de bromas que nos conocemos, sal de donde quieras que estés. No puede ser. Tengo que buscarla, ¿que habrá pasado?.
Arya muy preocupada por su madre, decidió buscar detenidamente no sólo por esa habitación, si no por toda su casa. Sin respuestas.
PRIMER CAPÍTULO
Hace un par de semanas exactamente, una familia se mudó a la casa de en frente. Llevaba abandonada años. Decían que hubo un asesinato pero yo no me lo creo, pero dudas si que tenía. La casa por fuera daba asco no obstante una de las ventajas es que era enorme y seguro que no valdría tanto como aparenta. Llevaba días preguntando a vecinos, amigos incluso decidí llamar a la policía. La daba por perdida. Todo el barrio sabía de su desaparición, toda menos aquella familia nueva. Como mi madre decía: "la curiosidad mató al gato" se me ocurrió la idea de ir y preguntarles.
-Llamo al timbre. Yo: Hola, soy Arya soy tu vecina de en frente.
Abriéndose la puerta apareció un chico de ojos castaños y pelo marrón creo que tenía mi edad. No se que se me pasó por la cabeza pero me quedé mirandolo durante varios segundos. Era guapo y parecía ser inteligente. Mi mirada no podía separarse de la suya.
Robert: Hola Arya, yo soy Robert encantado -dándome dos besos en las mejillas. Eres la primera que ha venido... A todos parece darle miedo estar por aquí. Que afortunado soy -con una sonrisita.
Arya: -Sonriendo. Suerte la mía -riéndome. Sólo me pasaba para preguntarte si por casualidad has visto a mi madre. Es mayor y se parece a mí mucho aunque el pelo es más claro comparado con el mío. Lleva cerca de una semana desaparecida y no se nada de ella. Todo el mundo la está buscando.
Robert: -Un poco nervioso. Emm, no lo siento... No se nada de ella, de verdad. Por qué no pasas y te enseño como ha quedado. Las apariencias engañan.
¿Las apariencias engañan?