Capítulo 20

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En un parque, no muy lejano de su casa, Do KyungSoo escuchaba tranquilamente música. Luego de un día agitado en clases, solía relajarse en aquella banca, observando los árboles y a las personas jugar, mientras sus oídos eran atrapados por las melodías que escuchaba. Era el panorama perfecto para el joven. Le gustaba disfrutar de su soledad, y no es que fuera antisocial, simplemente, creía que las relaciones con los chicos de su edad traían complicaciones, problemas, y demasiado ajetreo para su gusto, y eso no le gustaba.

Aunque...sin quererlo, en más de alguna ocasión había terminado envuelto en el caos y enredos producidos por la gente de su edad. Y lamentablemente, aquel día, no sería la excepción.

A lo lejos KyungSoo pudo divisar a un ajetreado y molesto JongIn que se dirigía a toda prisa en su dirección. Maldecía el día en que le había comentado que aquel parque era su lugar de calma, pues al parecer, al moreno le encantaba perturbar dicha tranquilidad.

Se quitó los audífonos que traía puestos, pues al parecer, JongIn necesitaba ser escuchado.

_ ¿Por qué no me contaste que habías sido interrogado por la policía? _ espetó molesto el recién llegado. KyungSoo suspiró_ ¿Qué demonios les dijiste?

_ Nada que pudiera involucrarte, así que descuida_ respondió KyungSoo, con la calma que lo caracterizaba.

_ ¿Estás seguro de eso? Porque acaban de tomar mi declaración, y no creo que estén muy convencidos de eso. Necesito saber exactamente que les dijiste.

_ Estás demasiado alterado. No voy a hablar contigo ahora.

_ ¿Y cómo mierda pretendes que esté? No me contaste nada de ese interrogatorio y de lo que dijiste ahí, pude haber metido la pata hasta el fondo.

_ No sé por qué te preocupas tanto. Tú no asesinaste a nadie, y hasta donde sé, ya no vendes esa mierda. Y si la vendieras, eres menor de edad, no pueden meterte preso.

_ Ese no es el maldito punto. Si alguien da un paso en falso, todo saldrá a la luz, y muchos caeremos. No se trata de ir a la cárcel simplemente_ dijo JongIn, intentando controlar su tono de voz_ pero claro...que puedes saber tú. No tienes nada que ver con todo esto, y tú historial de comportamiento está completamente limpio.

KyungSoo se puso de pie.

_ ¿Crees que no tengo nada que ver con esto ahora? _ inquirió algo cabreado_ JongIn, mentí en esa declaración por ti. Inculpé a alguien más. ¿Sabes qué significa eso?

JongIn se mantuvo en silencio.

_ Claro que no, porque eres un imbécil que solo piensa en sí mismo. No sé por qué sigo haciéndote favores, si se supone que ni siquiera te agrado.

_ No, Soo...espera, yo...

_ Y si tanto te asusta el que puedan relacionarte con esa mierda de las drogas, no debiste haber aceptado venderlas en primer lugar_ espetó el castaño_ deberías comenzar a pensar las cosas antes de actuar.

KyungSoo se dio media vuelta. No tenía ganas de seguir hablando con JongIn, y evidentemente, ya no podría estar en paz en aquel parque.

_ KyungSoo, espera. Tenemos que hablar aún. _ dijo Kai, pero fue ignorado por el castaño, quien se alejaba a toda prisa de aquel sitio.

JongIn suspiró, y se llevó las manos hacia el cabello, frustrado. Siempre metía la pata en lo que respectaba al trato con Do KyungSoo. Y no sabía si el castaño era el complicado de tratar, o él era sumamente estúpido cada vez que lo trataba.

...Flashback...

Un mes antes de la muerte de Zhang Yixing.

Kim JongIn había sido enviado por el profesor Lee a devolver algunos libros a la biblioteca. El moreno había aceptado feliz realizar aquella entrega, pues necesitaba un respiro de esa fastidiosa clase. Y una vez que hubo realizado el mandato se dirigió hacia el patio del instituto. Se ocultó en algún sector que lo impidiese ser grabado por las cámaras que todos sabían que ahí había. Una vez ahí sacó un encendedor y una cajetilla de cigarrillos de sus bolsillos y procedió a encender uno.

Blame me (HunHan)Where stories live. Discover now