FORJANDO EL DESTINO
Era Noviembre del 2008. El lugar: la isla Macross. En el cielo se veía el ir y venir de los VT en complicadas maniobras de simulacro de combate (siempre en modo Fighter). El ambiente era relativamente calmo, ya no había mas luchas por la posesión de la Isla, la unificación mundial estaba casi completa y consolidada, las investigaciones del SDF-1 –mayormente reconstruido y en período de acondicionamiento– estaban bajo el mando del franco–ruso Henry J. Gloval y un competente grupo de oficiales graduados de la Academia Robotech. En los últimos meses habían arribado combatientes, técnicos y pilotos seleccionados en distintos sitios del planeta. Lo mejor de lo mejor en cuanto a experiencia, inteligencia y pericia. Con tal motivo, en esos días llegaba de Hawaii un nuevo contingente de pilotos europeos y sudamericanos. Como era de esperar entre ellos se hallaba el "quisquilloso" Alois B. Fisher .
Para Fisher había sido insoportable el mes y medio de acondicionamiento en la base de Hilo West en Hawaii, con la "pu** bandera yankee" en lo alto de un mástil y la del nuevo Gobierno de la Tierra Unida (GTU) en el otro. Pero al fin y al cabo había logrado su objetivo, incluso no le importaba si el "tío" Hamilton le había dado una mano.
La cuestión era estar en el selecto grupo de elite de pilotos que protegerían a la nave de origen extraterrestre. Esto le daba una oportunidad de entrar a la historia, sin duda, para el orgullo de la raza aria. Fisher no ignoraba la posibilidad de que los alienígenas aparecieran en cualquier momento, pero de nada de esto era consciente ninguno de los insectos que lo acompañó durante el viaje. Lo que sólo él sabía, gracias a su tío (y a los servicios que antes le había prestado), era que se reportaba desde Cabo Kennedy, Surinam y Japón la recepción de extrañas señales provenientes de los satélites más alejados, que aseguraban una presencia extraña durante unos días entre las órbitas de Neptuno y Plutón. Esto no era algo nuevo, la primera vez se había reportado en el 2005, y luego volvió a repertirse nuevamente y del mismo modo: la misma "presencia" se detectaba por unos días y luego desaparecía. En total había habido 3 contactos en casi 4 años. Esto mantenía la expectativa en el GTU y en los altos mandos militares, y desencadenó la decisión de adelantar la puesta a punto de la nave a riesgo de dejar gran cantidad de bloques de la misma sin explorar debidamente, además de no poder estudiar a fondo la complicada tecnología que sólo el doctor Emil Lang podía llegar a entender. El doctor había dado como plazo el 2013, año en que seguro su equipo tendría el completo dominio en la supuesta "Robotecnología" e incluso se podrían duplicar algunos de los dispositivos y avanzar aun más en nuevas investigaciones. Pero la urgencia de la situación y la falta de presupuesto mundial (por 10 años se exprimieron las economías del globo para la defensa contra un enemigo que posiblemente no viniera) habían hecho que se intentara fijar como fecha de despegue julio del 2009, agosto a mas tardar.
La culpa la tenía ese cerdo de Russo, el principal impulsor de la medida. Incluso aseguraba que daría un discurso apropiado para la ocasión, esperando tal vez ser reelegido en su cargo del Gobierno de la Tierra Unida. Además había otros, como Hayes o Zukov, que pensaban que la serie de Grandes Cañones –proyecto al que Gloval se oponía– era tanto o más importante que el proyecto SDF-1. Sea como fuere, allí estaba Alois Fisher descendiendo de su transporte y rumbo a la barraca de oficiales a la que estaba destinado. Allí conocería a su comandante de escuadrón, un afamado piloto de los Internacionalistas, que había bajado 108 aviones y hecho de su nombre una leyenda: el Teniente Comandante Roy Fokker. Pero eran las 4 de la tarde y dentro de un buen rato querría comer y tomar un sueño reparador. ¿Qué haría hasta entonces?
Fisher durmió largamente y desayunó a gusto después de una noche "movida". Más al salir de su habitación se hallaba el Teniente Adam Olsen del escuadrón Azul que le saludó oficialmente diciéndole que el Comandante Fokker le enviaba a fin de que le hiciera de guía y le reuniera con él al mediodía para presentarse y de ser posible iniciar las prácticas de lineamiento básico.
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La Saga Fisher
Science FictionAmbientada dentro del universo expandido de Robotech, desde la Guerra Civil Global a la Tercera Post Guerra Robotech (con los Invids). Ex piloto del Skull, rival de Rick Hunter y Max Sterling, el polémico Alois Fisher vive diversas etapas de las gue...