capitulo 11 la teoría de Midorikawa

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Era una noche fría y oscura todo dormía tranquilamente bueno no todo, en una habitación estaba cierto peli plata de ojos gris azulado que estaba acostado en la cama  mirando el techo pensativo, hasta que una palabra retumba en su mente

"Esta listo, ya puedes decirles"

Cierra los ojos un momento y una pequeña luz blanca sale de el, pero esa se comienza a volver negra y asustado abre los ojos, se sienta algo agitado y intenta calmarse

-Demonios -susurra despacio mientras intenta recupera su respiración- ¿como mierda se lo voy a decir?

Suspira casado en eso siente un pequeño dolor en el pie, se muerde el labio y cierra los ojos aguantado el dolor, hasta que siente como alguien se sienta a su lado y el acaricia el brazo, confundido abre los ojos encontrándose con unos ojos negros

-¿Goenji-kun? -pregunta con una voz tierna mientras lo miraba-

Pov Goenji

Estaba durmiendo tranquilamente hasta que me dieron gana de toma agua, salí de mi habitación y cuando paso por la habitación de huéspedes logre ve una pequeña luz blanca, confundido entro pero a hacerlo no encuentro nada, solo a Fubuki sentado con los ojos cerrado y mordiéndose los labios... un momento ¿mordiéndose los labios? Me el acerco y me siento a su lado mientras el acaricio el brazo, el me mira a sentí mi acción

-Fubuki ¿esta bien? -pregunto mirándolo a los ojos-

-Yo...-baja la cabeza apenado- la verdad no

-¿Que tienes? -pregunto preocupado y el levanta la cabeza-

-Yo... me duele el pie...-me mira pero vuelve baja la cabeza- pero... tranquilo.. no te preocupe seguro no es nada

Lo miro y suspiro mientras el agarro el mentó para que me mira, el me mira con su lindo ojos gris azulado que me gusta verlo y con un pequeño pero notable sonrojo en su mejilla

-Fubuki, siempre me voy a preocupa porque te quiero -el acaricia su mejilla que por cierto se vuelve mas rosado-

-Goenji-kun -el me mira tengo que decir que se ver muy tierno y...violable- yo..también te quiero -susurra sonrojado y con una sonrisa muy dulce-

Lo abrazo y el me corresponde gustosamente, no se porque me siento bien abrazarlo y tenerlo a mi lado no se porque,además que el es el único que me hacer reí claro después de mi hermana, me separo de con una sonrisa  y algo ruborizado

-Iré a buscarte  algo para aliviar tu dolor ¿si? -pregunto mirándolo mientras me levanto de la cama-

-Esta bien, Goenji-kun -me sonríe como siempre lo hace-

Salí de la habitación hacia la cocina, cuando llego agarró un baso de agua y una pastillas para volver a subí, entre otra vez y me encuentro con Fubuki con los ojos cerrado

-¿Fubuki?

-¿Hm? -veo como abre un ojo y me mira algo casado-

-Ten -el doy la pastilla y el baso de agua- toma esto se te pasara

El se la toma y se vuelve acotas en la cama, yo me quedó mirándolo un rato

-Gracias, Goenji-kun -susurra con dulcera ante de cae dormido-

Nos volvemos a Ver Donde viven las historias. Descúbrelo ahora