Un universo con muchas dudas

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¿Qué es vivir?, la pregunta bucea los más profundos e introspectivos aspectos de mi persona, mi alma y lo realmente poco que creo conocer de mí, en lugar de generar una respuesta –como es de esperarse- surgen una nueva interrogante: ¿Quién soy yo?
Respuesta que algunas personas vacilantes y con cierta tendencia a lo estúpido responden con algún dato obvio presente en su distintivo de ciudadanía nacional (número de habitante o su nombre y apellido), yo ciertamente respondo con un silencio retumbante en mi mente que solamente revela una completa ignorancia en quien soy. Sin rendirme como un buen matemático recorro de lo micro en dirección a lo macro para obtener una respuesta acertada –o al menos cercana-, entonces indago:
¿Cuál es mi propósito? Mi recorrido en esta dimensión, en este plano, en este planeta, en esta temporalidad es incierto – ¿o no?-, al menos yo no lo conozco ¿Y quién lo conocería? Una pregunta tan incierta como cierta… ¿Hay algo ó alguien que nos controla? ¡Realmente me fascinaría conocer dicha respuesta! Noto que mi interrogante inicial no quedo satisfecha, cuando mucho entendida a cabalidad. Rápidamente la inclino al ámbito creyente ó religioso y como escéptico por excelencia, declino responder por incertidumbre… paso de responder esa interrogante…
¿Por qué amo y temo? Instintos sensoriales comunes en toda la especie humana, rasgos que nos definen y nos moldean. Personalmente me considero sumamente consumidor de estos sentimientos, sin embargo, no acierto una explicación de su motivo, como mucho definirlos puedo.
¿Qué me motiva a vivir?, vagamente respondo sobrevivir después de destapar una botella de vino que adorna mi estantería junto a mis condecoraciones por mis estudios doctorales, pero no es una motivación pues tengo el consentimiento que algún día esa supervivencia llegará a un final. Comienzo a decaer cuando nuevamente no alcanzo a responder… ¡Siguiente!
Las manecillas del reloj indican que han pasado 10 horas de mi análisis inicial, al estudio se suma “l’élixir des dieux” otra botella de vino, pero esta edición limitada que estimula mis fronteras intelectuales.
¿Qué legado ansío dejar? Mi manera de ser y comportarme, mis pensamientos, ídeas y filosofías escritas ó debatidas buscan generar un legado, que quede un renombre en mí… pero: ¿Qué renombre? Y ¿Por qué?... con la botella a medio terminar, mi cabello despeinado y mi traje desarreglado decido abandonar… veamos la última que tal…
Antes de continuar con mi estudio, veo por la ventana mi reflejo: poco reconocible. Con cierto asco hacia mí vuelvo:
¿Por qué siento la necesidad de procrear y sustentar la especie humana?, Rindo mis energías mientras bebo el ultimo sorbo de vino, lloro mientras mi mirada se nubla, me desplomo sobre mi escritorio mientras que la copa dirige su existencia física hacia el suelo donde se quiebra en varias docenas de pequeños vidrios… no caigo por la ebriedad –Bueno quizá en cierto punto- sino por la inutilidad de décadas de estudio en donde no puedo responderme quien soy…
12 preguntas y ninguna respuesta, frustro mi mente y mi existencia en general. Soy un universo, internamente, soy una dimensión de sensaciones y emociones sin cesar ni explicación lógicas ó aparentes. Efectivamente incomprendida mi existencia, soy universo con muchas dudas. Indudablemente la vida es una ciencia incomprendida, muy estudiada y extremadamente subjetiva, al borde de la desesperación espiritual, ruego, imploro y suplico –a lo que sea ó quien sea- una respuesta a todas mis incógnitas, condeno mi vida a la nada si solo consigo las respuestas pues las dudas son millones y las respuesta, ni una sola. ¿Por qué algo tan simple como mi misma persona, verdaderamente es la mas compleja realidad?

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⏰ Última actualización: Sep 14, 2018 ⏰

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