Capitulo 2:Los Peterson✓

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Caminaba por los pasillos del horfanato que al decir verdad y odio admitirlo no quería irme, no quería. Otros tal vez en mi caso se alegrarían pero en el mío, no! Y lo peor de todo como recuperaría mi maldita mochila? Iba ser un reto.

Mi teléfono comenzó a sonar y era el rey de Roma Jackson mi queridísimo y estupendo idiota favorito.

–¿Hola?–Hable y lo que escuché después fue:
–Mocosa, estúpida te he estado esperando desde hace media hora, mueve tu grandísimo culo y escápate por la maldita ventana marca de ropa, no me voy a estar toda la maldita noche hija...–Decidí interrumpirlo.

–Jack tenemos un 3312, repito un 3312–hable por la otra línea.

Jack salió el año pasado del horfanato y aún así no ha dejado de ser mi mejor amigo la única persona en el mundo que confío.

3312: Me han adoptado

Pusimos las reglas cuando nos conocimos.

–¿QUE? NOOO! En serio? Mierda, iré para allá– y con eso colgó.

Dios siempre tan dramático...Aunque me podría ayudar a encontrar mi maldita mochila. Fui hacia el patio por la puerta trasera que se tenía que cruzar la cocina para llegar al comedor y de ahí al patio trasero, bueno me entendieron.

Corrí cuando vi a un chico pasar por la parte de atrás y prendí la pequeña linterna de mi celular de juguete se podría decir.

–Donde carajo estás, maldita mochila?–me hable a mi misma, camine hasta dar la vuelta y la maldita mochila no estaba.

Vi pasar el auto de Jack a grandisima velocidad y me alarme, corrí según yo a la puerta que daba a la entrada del horfanato, pero que creen me estrelle contra un muro y caí de culo.

–Hay carajo! Esto ni siquiera debería estar aquí. Estupida. Estupida.–Me levanté y escuché unas risillas.

–¿Quien anda ahí? Sal maldito cobarde!–Grite hacia la nada. Unos arbustos se empezaron a mover.–Es el aire estúpida, nada malo va salir de ahí...–Me tranquilicé y camine hacia el otro lado aún buscando mi estúpida mochila.

–Baby shark tururuturu–empece a cantar, ¿Que? Esta genial.

Después de 10 largos minutos llegué a la puerta de en frente y una gran limosna estaba estacionada en frente. Lo que más me dio gracia es la cara de idiota que puso Jack cuando vio el auto y después su vista cayó en mí.

–Estupida!–chillo y corrió hacia mi, haciéndome caer al suelo

–Mierda! Sí que pesas! Muévete!–bufe y el solo se digno a no moverse.

–Me dijiste gordo y eso no se hace...

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Hasta aquí el capítulo de hoy espero y realmente os guste. Chao

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⏰ Última actualización: Sep 16, 2018 ⏰

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