Estaba perdido en un mar de recuerdos, de soledad, de tempestad,
Luego cerré los ojos y hablé con mi alma,para recordarme que aun existe calma, para no olvidar que aún mi destino puede estar en mi palma.Donde se terminaba el sendero del infierno eterno, la conocí una princesa llena de luz con un corazón tierno, observaba cada detalle de esa perfecta obra de arte, ¿quien habrá sido capaz de lastimarte?
Me senté a su lado y solo le regale mi silencio, ella solo dijo que me aleje que todos querian herirla ¿acaso no notas mi cansancio?
Su desición respeté y me alejé, pero antes de irme le di una nota de papel solo eso le dejé.
En ella escribí lo que pudo haber sido.
Una historia de amor sin tristeza,
La promesa de jamas darme por vencido, La historia de un poeta y su princesa