Dios santo, te odio. No hay mejor definición.
¿Crees que con esos ojos que intentan mentir, podrás hacer algo con tu vida? Tú sabes bien con quién estás jugando, sabes perfectamente que yo siempre saldré victoriosa.Deberías verme en juego, pero esta vez no serás parte del público, serás una jugadora.
Porque tú creaste todo esto y te haré sufrir. ¿Recuerdas que dije que soy bastante rencorosa? Estoy sedienta de venganza.
No me creí capaz de dedicarte palabras, frases, capítulo, episodios de mi vida. Pero he de hacerlo. Te estas hundiendo en tus propias mentiras, ¿no aprendiste de mi? Aprendiste tantas cosas menos lo más importante. Que imbécil.Ojalá y sepas que conmigo no has de jugar, te lo repetí más de mil veces y aquí estás, jalándole la cola al mismísimo diablo.