"Bienvenida forastera"

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Tenía las mejillas húmedas aún de tanto llorar, pero ya de poco servía, tendría que dejar mi vida atrás para ir a Wolverhampton por el estúpido trabajo de mi padre...<<Suena a tópico lo sé pero no es más que mi triste realidad>> pensaba una y otra vez hasta que el sueño gano la partida y me quede dormida en el coche que me conduciría a mi nuevo hogar.

Al despertar me encontré con mi nueva casa unifamiliar y con un enorme jardín, pero yo hubiera cambiado eso mil veces por mi piso en Londres y el olor a tráfico mañanero.

Tras una tarde de mudanza caí rendida en mi nueva cama, incluso el sueño pudo una vez más con mi preocupación de ser la nueva del instituto.

6:20 de la mañana contaba con 2 minutos para decidir si ser de las que se preocupan por su aspecto para dar buena impresión o de las que no, 1 minuto, me decidí por la segunda y agarré mis vaqueros rotos y mi camiseta de 'The Beatles' mientras pensaba si mis nuevos compañeros sabrán apreciar la buena música.

Bajé las escaleras que me conducían a mi nueva cocina y agarré la taza de café de mi padre, le dì un trago y el me miró con mala cara por encima del periódico que estaba leyendo.

-La necesitare más que tu- dije

-Claro se me olvidaba lo mucho que ayudaste ayer con la mudanza, ah no, te quedaste dormida- dijo casi con malicia

- Ja, ja- dije con sarcasmo y salí de la casa.

No había dado ni dos pasos cuando mi nueva vecina se acercó corriendo con una amplia sonrisa:

-Bienvenida forastera, soy Lucy Parker tu nueva vecina.

-Hey, soy Claire y no me van mucho las convenciones sociales

-¿Y te va que te acompañe a clase? Estas en mi curso

-Supongo que podré dejar que lo hagas

-Estupendo- dijo sonriente

El camino a clase no se me hizo largo ya que Lucy apreciaba mi camiseta y nos pasamos el trayecto hablando de viejas glorias musicales.

Entré a clase con la vista nublada y las rodillas tambaleantes por culpa de los malditos nervios del primer día, aún así mis ojos consiguieron fijarse en un chico, el único que estaba solo , como apartado, tenía un ojo morado. Justo cuando me decidí a acercarme Lucy tiró de mi brazo hacia un grupo de unas 5 personas.

-Es Liam, olvídalo- me dijo con un tono tenso de voz

Pero ya era tarde, no podía olvidar aquella mirada triste.

Liam's factorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora