Greedy

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Codiciosa
La palabra perfecta para describir a Nayeon, Ella siempre iba a por más, nunca se conformaba con lo que tenía o le daban, para algunos ella era una mal criada, pero Momo la describía como Codiciosa.
Tu sabes que soy codiciosa para el amor
Nayeon sabía de su mala fama, pero le daba igual, a ella le importaba muy poco lo que pensaran de ella, la pelirroja estaba conforme con su vida y sabía que lo que opinaran los demás no debía preocuparle.
Chica, me das sensaciones, que nunca antes he sentido
La chica de dientes de conejo sabía que había hecho mal al probar a Momo, aunque hubiera estado borracha cuando lo hizo, su estómago se encogió alborotando sus sentimientos, dejándole de cabeza el cuerpo ya sin saber que pensar y que hacer.
Estoy haciéndolo obvio por llamar a tu puerta
Sonrió inconcientemente mientras tocaba sus labios, todavía sentía su suavidad y recordaba el sabor a melocotón que le había quedado impregnado y que su mente no quería olvidar.
Sé que voy a ir esta noche
Nayeon estaba necesitada, aún tenía el papel donde Momo le había anotado su número, dirección y fechas disponibles, pero había una en especial que estaba remarcada, como si supiera que ese día ella la volvería a necesitar, si específicamente el día de su cumpleaños 22/9, era gracioso que Nayeon se lo tomara como regalo de cumpleaños, pero es más gracioso que ella fuera en busca del amor de la menor sin ella saberlo.
Tu sabes que voy a ir esta noche
Momo sabía que en esa fecha en específico la mayor aparecería en su casa, había preparado su hogar, su habitación más específicamente, la lencería la utilizaría solo si la pedía, pero Momo sabía que era el cumpleaños de la chica con la sonrisa similar a la de un conejo, y también sabía que Nayeon podía ser mucho más peligrosa que ella, Nayeon era toda una jugadora, nunca se quedaba con una chica en específico, pero reconoció como la mayor se había tensado en aquel beso, como busco de alguna manera tener más de ella.
No quiero negarlo más
Nayeon llamo a la puerta de la castaña ya lista para entregarse, no quería esperar ni un segundo más, ella creía que era para quitarse la necesidad ya que este último mes había estado ocupada con trabajos de la UNI, pero en realidad ella ansiaba por tener a la menor en brazos solo para ella.
He estado en este estado de mental
Ahí estaba Momo, frente a ella con un top y un short que dejaba poco para la imaginación, su pelo terminando en pequeñas ondas descansando sobre sus hombros, su piel se encontraba un poco más morena que la última vez, el poco tiempo que había pasado logro que la castaña se pusiera mucho más buena de lo que ya era y eso lograba que Nayeon se muriera por dentro con tan solo verla.
Cariño, has tenido suerte porque estas jugando con la mejor
No la miró ni dos segundos seguidos que ya se había avalanzado a esos labios carnosos y deseosos por volver a besar a la mayor, Momo hacia fuerte su agarre en los hombros de Nayeon demostrando que esta podía dominarla, dieron dos pasos torpes mientras seguían con su beso, Momo pateo como pudo la puerta logrando cerrarla, Nayeon aprovecho este descuido para cargarla y apoyarla en la mesa o sillón más cercano.
Y soy codiciosa
-Sabía que vendrías- Susurro la menor pegada a su oído logrando excitarla más y que su entrepierna comience a sentir un calor indescriptible, cuando por fin la dejo en la mesa Momo volvió a suspirar más que hablar -Había preparado mí habitación, pero me excita la idea de que quieras hacérmelo en todos lados- dio una media sonrisa y enredo sus piernas a la cintura de la mayor -Tal vez si eres obediente aquí te lleve a tu habitación- Habló con una voz ronca Nayeon logrando que la castaña se mojara un poco más.
No estoy hablando de dinero, solo estoy obsesionada psicológicamente
Mucha gente le dijo a Momo que tuviera cuidado, que Nayeon si la quería era por la plata, que cuando quedara en la ruina por todos los caprichos de la mayor que la abandonaría, pero Nayeon no estaba demostrando eso, estaba muy concentrada en el cuello tan tierno y sedoso de la menor que le importo muy poco si ella tenía plata o no, era la primera vez que estaría con alguien solo por sentimientos -Veamos que tan preparada estabas para mí vista- Dijo una vez que terminó de marcar varias veces el cuello de la menor, quería asegurarse que no se la quitarían como la última persona a la que quiso, Nayeon subió lentamente sus manos por el abdomen marcado de Momo arrancándole algún que otro suspiro.
Tu sabes que soy codiciosa para el amor
Cuando elevó un poco el elástico del top dejando ver qué no tenía lencería provocativa y solo tenía un sujetador común Nayeon frunció su ceño -No estabas preparada- Le dio una nalgada a la menor en señal de desaprobación -L-lo siento- Dijo en un lloriqueo Momo -Te quiero aquí en diez minutos con lencería, si no estás lista para ese entonces te castigaré- Al terminar de decirle aquello mordió suavemente el lóbulo de la oreja de aquella chica.
No necesito una llamada de teléfono
Nayeon había agradecido que no la había llamado porque si no nada hubiera salido así, está visita sería más formal porque nadie dice "oye, tal día nos juntaremos a follar ¿Te parece?", La mayor río por aquellas ocurrencias y se quitó la remera.
No tengo nada que decir
Momo quería saber que sería ese castigo, pero no quiso hacer esperar a aquella codiciosa chica -Y-ya estoy lista- Mencionó bajando las escaleras -¿Por qué no hablas?- La menor se acercó rápidamente a ella, pero Nayeon no hablaría, no tenía nada para decir, solo quería sentirla de una vez por todas.
Te lo voy a decir cuando este acabado
Nayeon se dio cuenta de que tenia sentimientos por la menor, aunque fueran mínimos, y se los confesaria después de acabar, la tomo por la cintura antes de lanzarse a los labios de esta, el beso no tenía ningún dejo de lujuria o deseo, este beso era diferente, lleno de cariño y amor, y eso logro estremecer a Momo, subió de nuevo su mano por su abdomen jugando con el elástico del delicado sujetador Rojo de la menor -Quitamelo ya- Rogó la castaña al ser tentada por la de mayor altura -Todo a su tiempo, Princesa- Susurro volviendo a elevarla para dejarla de nuevo sobre la mesa para luego bajar su cabeza lentamente hasta llegar a su escote y comenzar a besar lo que este dejaba afuera, Nayeon no iba a negar que Momo tenía un cuerpo perfecto a su vista, una piel sedosa y un poco bronceada que lograban enloquecer a la mayor.
No tengo nombres para jugar
Entre besos, caricias y gemidos ambas terminaron desnudas en la fría mesa, Nayeon ya estaba pérdida en el sexo de la menor, sintiendo su calor e impregnandose con su olor embriagador, sentía los gritos de Momo pidiendo que no pare, la mayor se estaba volviendo loca, la voz de aquella chica aunque lograba irritarte si hablabas con ella ahora eran música para los oídos de la contraria, gracias a los cuatro dedos que ya estaban dentro pudo sentir que no le faltaba mucho para terminar, sus paredes se contraían cómo señal y los gemidos incontrolables de la pequeña eran otra -Mierda, Nayeon ya llego- eso fue lo único que pudo gritar con coherencia.
Solo necesito quitar esto del camino, oh cariño!
Al terminar Nayeon cargo a Momo (la cual estaba demasiado cansada como para moverse por si sola) a el baño, la menor estaba bañada en su sudor y la chica de sonrisa similar a un conejo creyó que no le gustaría acostarse así, cuando la bañera estuvo llena ayudo a Momo a entrar para luego imitar su acción y quedar a espaldas de esta, tomo la esponja con un poco de jabón y la restregó por la espalda de aquella chica, cada tanto dejaba algún que otro beso en su cuello y acariciaba las marcas suavemente -Nayeon, estoy segura de que esto no lo haces con todas ¿Pasa algo?- Y tenía razón, la había descubierto -Si, te amo- Soltó abrazando su espalda logrando escuchar los latidos acelerados de la menor -Y-yo- trato de retomar la palabra Momo -No, shhh- hizo que se callara -Solo quería sacarme esto de encima, está bien si no correspondes- beso su espalda.
He estado en este estado de mente
Estaba nerviosa y no lo iba a negar, ella ya había estado así antes, cuando se confesó a Sana y cuando está le dijo que debían hablar, esa última no fue una experiencia buena, pero lo que importaba era que había logrado superarla y dejar de buscar a alguien que tenga algún parecido corporal a ella, con Momo fue todo diferente, ella había logrado que sus hormonas se alborotaran con un simple beso, y ahora estaba esperando a una respuesta aunque le hubiera dicho que no era necesario -Yo también lo hago- Dijo de repente Momo llevando su espalda hacia atrás chocando con el cuerpo congelado de Nayeon, no podía estar más feliz.
Cariño, has tenido suerte porque estas jugando con la mejor
Cuando terminaron de bañarse fueron hacia la habitación de la menor sin importar que estuvieran desnudas, Nayeon sentía como si estuviera volando, se sentía llena después de tantos años vacía y sin alguien que la quisiera, al llegar a la habitación está estaba con una luz tenue y la cama estaba cubierta por una fina sabana roja -Así que en verdad me estabas esperando- Río abrazando la espalda de Momo -Si, cállate- Habló un tanto sonrojada -Me gusta- dijo besando suavemente el cuello de esta -¿Te quedarás a dormir?- preguntó dándole el espacio necesario para que siguiera besando su cuello -Tal vez- al decir eso la menor se dio vuelta con un puchero -entonces era todo mentira- sus ojos se Aguarón dejando ver la decepción de esta -Nonono, no es por eso- tomo sus mejillas totalmente preocupada -Es que tengo que asegurarme de que mañana no tenga cursada, ya que aquí no tengo ropa y no quiero ir con la que use hoy- beso su frente -Déjame que preguntó y te lo confirmo ¿Quieres?- Le sonrió para tranquilizarla, Momo tenía miedo a que todo fuera una farsa y este con ella solo para pasar el rato.
No estoy hablando de dinero, solo estoy obsesionada psicológicamente
Cuando le confirmaron que no cursaría abrazó a Momo y se acostó junto a ella, parecía como si todo estuviera a favor de ellas, Nayeon acarició la cabeza de la contraria mientras cantaba, logrando que está se durmiera, amaba tenerla así, quería que nadie se la arrebatará como había pasado con Sana, o por lo menos no se la presentaría a JeongYeon ya que ella fue la que saboteó su anterior relación, no duro mucho tiempo despierta, el calor que emanaba la menor más la comodidad de la cama y la hermosa chica que tenía en brazos lograban adormecerla y hacerla sentir cómoda, al día siguiente al no despertar con Momo creyó que todo había sido producto de su imaginación, pero al notar que no era su habitación sonrió ampliamente, de levantó y tomó del ropero iba camiseta holgada y unos shorts, cuando bajó las escaleras el olor exquisito del desayuno inundó sus fosas nasales, se acercó sin hacer ruido y la abrazo logrando asustarla -Buen día- dijo besando su mejilla -Ve a sentarte, ya está listo el desayuno, te lo iba a subir, pero despertaste antes- Soltó una risita mientras llevaba las cosas a la mesa -Eres un amor- Le dijo tratando de ayudarla.
Tu sabes que soy codiciosa para el amor
Pasaron 3 años de ese encuentro que terminó para bien, ahora Nayeon se encontraba preparando todo, estaba muy nerviosa, estaba vestida como aquel día, Mina, Chae, Jihyo, Tzuyu y Dahyun la estaban ayudando, estaba tan nerviosa que apenas podía hablar, ya se acercaba el momento, faltaba poco para que llegara Momo y ella ni siquiera sabía si recordaba el discurso -Llegué- anuncio la menor, cuando llegó a la sala y se encontró con Nayeon con tus aquella cena supuso lo que iba a pasar -Hazlo ahora y tomemos la cena como un festejo- Sonrió la chica melocotón -Está bien- Soltó un gran suspiro para calmar sus nervios -Hirai Momo, se que todo esto comenzó de una manera algo extraña, pero se que eso no nos impidió amarnos con locura, gracias por apoyarme, porque estuviste siempre ahí, porque estás ahí y por permitir que nuestro corazón sea uno solo, por aguantarme con mis ideas locas y todo el paquete que formó, simplemente gracias, ahora sí, Hirai Momo ¿Me concedería el honor de ser mí esposa?- Al terminar de hablar Nayeon apoyo su rodilla derecha en el piso y saco un anillo de su bolsillo -Mierda, te odio- Comenzó a llorar Momo dejándo ver qué no se esperaba para nada esto, ella había creído que le diría que había conseguido el trabajo por el que tanto había luchado -Di algo por favor- Susurro Nayeon mientras se levantaba -Que si, que si quiero- la menor se lanzó a los brazos de la mayor, Momo siempre había sabido que Nayeon era codiciosa para todo.




The End

Hola Lovers 💞
Wow, esto fue un récord, escribí 2256 palabras, espero que les haya gustado, las palabras del final que están escritas con un estilo diferentes es porque fueron sacadas de la canción Be As One de Twice.

Para Ibu, que me ayuda mucho, que es un amor de persona y que ama el Namo tanto como yo, no se dan una idea de cuanto amo a esta personita tan genial y hermosa. I Love U So Much <3. Gracias por ayudarme cuando tenia dudas con los OS, gracias por ser tan buena persona y una de mis escritoras favs

Greedy (OS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora