Honey 💚 JHope X TN 🍀 [Editando]

Prólogo.

Pasajeros, sean bienvenidos a su destino. Korea-Seúl.

Subimos al coche y empezó a andar, y hablamos, de lo que pasamos en la última vez que me visitó en Chicago, recordando con risas y tal vez nostalgia. Mientras avanzabamosme daba cuenta de lo hermosa que aparenta ser ésta ciudad, después de un largo tiempo llegamos a una casa que él prometía como suya.

Bajamos del auto y llevó mi maleta a la entrada, me dejó entrar para entrar justo detrás de mí.

Después de unos minutos siento como me jalan de un brazo, y me obligan a subir las escaleras.

-- Jeon ___...

-- Park Chanyeol... -- hablé con él mismo tono dramático que él utilizó.

-- Tan linda, ¿quieres ver tu habitación? -- me estrujó las mejillas.

-- De acuerdo -- entré a la puerta que Yeol me dijo, y al abrir la puerta quedé impresionada de lo linda que se veía --. Me gusta mucho -- dije casi en susurro y analicé toda la habitación.

-- ¡Genial! Me esmeré mucho para decorarla -- dijo emocionado por mi respuesta --. Ven, vamos a comer -- me llevó a la sala de estar donde posteriormente ordenó delivery y el menú fue pizza.

No podía pedir menos, ambos estábamos cansados, él de su trabajo y yo del viaje; nos apetecía algo rápido.

Tiempo después, el repartidor llegó a  casa donde Chan lo recibió y nos dejó el pedido. Él se encargó de pagar luego de levantarse del sillón de tres plazas donde nos encontrábamos y se dirigió a la cocina conmigo siguiendo sus pasos.

Eso me trajo un recuerdo de cuando en la infancia, Chanyeol era nuevo en el vecindario y yo insistía en llevarlo a casa a comer.

Nosotros en el sofá jugando luchas con la televisión prendida, Yeol llorando por mi mal golpe y yo intentando calmarlo para que mamá no me reprendiera por mi conducta. Luego de más golpes y llantos, mamá nos llamaba a comer, él salía disparado a la cocina y yo pisandole los talones como ahora.

-- Oye, ___-- me dijo notando que tenía la mirada perdida en algún punto de la cocina.

-- ¿Ahh? Dime, lo siento -- dije con el bocado en la boca.

Ignoró el pequeño despiste que tuve y dijo: -- Unos amigos vendrán a celebrar tu llegada, les comenté sobre ti, y querían conocerte. Vienen más tarde.

-- Bien -- asentí. Luego de terminar mi última rebanada decidí ir a prepararme para las visitas que esperábamos, por lo que me levanté de mi asiento con intención de cambiar mi atuendo y aplicarme un poco de maquillaje.

-- No te sientas en la necesidad de cambiar tu ropa, estás perfecta así -- me sonrió tiernamente aún con él bocado en la boca.

-- Lo sé -- dije egolatra --, pero no quiero dar una mala impresión -- luego salí rápidamente a mi habitación.

Después de un par de horas arreglandome tocaron el timbre y escuché varias voces, entonces fue cuando Chanyeol me llamó, a lo que yo corrí hasta él viendo a unos chicos en espera de mi presencia.

-- Hola, mucho gusto -- un chico alto de hombros prominentes saludó co reverencia la cual correspondí.

-- Así que tu eres de la que habla tanto Chanyeol -- habló otro chico amable, con una tierna sonrisa. Sus labios formaban un tierno corazón.

-- Supongo -- solté un tanto confundida.

-- Chicos, la asustan -- me abrazó dramáticamente. Sin embargo, tenía razón, me sentía intimidada de tantos chicos --. Bien, te los presento -- dijo entusiasmado y tomando un papel muy serio --. De acuerdo; él es SeokJin, Taehyung y Hoseok -- los señaló y cada uno saludó con la mano.

-- Mucho gusto, chicos -- sonreí nerviosa.

Pasamos a sentarnos en el sofá para ver algunas películas con palomitas. Normalmente me cuesta mucho trabajo y tiempo soltarme fácilmente con la gente pero esta vez hubo algo distinto, tal vez era por estos chicos que emanaba una clase de confianza de lo más sincera, aunque ellos tomaron bastante confianza en un tiempo corto; me calleron bien, sobre todo Tae.

Así pasamos algunas horas: bromeando y riendo con el televisor reproduciendo una película que era mas bien comedia. Y aunque  podíamos hacer más cosas optamos por sólo ver más films ya que se sentía muy cómodo de esa manera.

Pero luego, la noche cayó sobre nosotros como un balde de agua fría, tan rápido que no nos dimos cuenta y ahora la única luz natural que nos acompañaba era la preciosa luz de la luna.

Chanyeol suplicó que se quedaran, pero, el que entendí era SeokJin, dijo que no quería causar molestias y se fueron dejando a un Chan algo dramáticamente deprimido.

Hicimos un poco de limpieza sobre el desastre que dejaron los otros chicos junto a nosotros, y nos fuimos a duchar para tomar una ligera siesta, mañana me esperaban muchas solicitudes de empleo y empresas a las cuales visitar.

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