Capítulo 23

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Estaba sentada en la sala cuando Logan entró en la casa. Se dio cuenta que me encontraba allí y se sentó a mi lado.

- ¿que te sucede bella durmiente?

- estoy molesta

- ¿con quién?

- con Layla! — no pude controlarme — le contó a Troy que un chico me trajo a la casa anoche y este esta sumamente rabioso, entre ese chico y yo no sucedió nada! Y ya Troy se esta imaginando cosas

- tranquila, tuvo que haber sido un malentendido

- no lo fue, Layla se lo contó sin pensar en que pasaría entre nosotros

- hablaré con ella

- es demasiado tarde...

- ¿porque?

- creo que Troy no quiere saber nada de mi — una lágrima comenzó a rodar por mi mejilla.

- no llores hermanita — Logan me abrazó y comenzó a acariciar mi cabello — si Troy te ama como dice, no va a permitir que una cosa como esa pueda más que su amor, así que tranquila

Subí las escaleras y me encerré en mi habitación. Mi celular comenzó a sonar, era Rafael.

- hola hermosa, ¿estas bien?

- no, estoy teniendo problemas y no sé que hacer

- ¿necesitas hablar con alguien?

- la verdad es que si.... necesito hablar con alguien

- no se diga más, dame unos 15 minutos y llegó a buscarte

- no... mejor nos encontramos en otro lugar, no quiero más problemas

- como prefieras

No sabía si estaba haciendo lo correcto, pero necesitaba desahogarme con alguien, no podía aguantar más este dolor, pero no creo que Rafael sea la persona correcta, solo llevo un día de conocerlo y ya le voy a contar mis problemas, ¿de verdad Megan?

Le pedí el auto prestado a Logan y comencé a conducir hasta donde habíamos quedado Rafael y yo. El auto de Rafael estaba allí y al percatarme Rafael estaba recostado de su auto con los brazos cruzados.

Me bajé del auto y comencé a caminar hacia él, no pude aguantarme y me tiré encima de él y comencé a llorar. Rafael me miraba confundido, me abrazó y comenzó a acariciar mi cabello al igual que Logan lo había hecho.

- tranquila Megan, no sé que te sucede pero te ves mal

- ¿porque no puedo ser feliz? ¿Porque siempre me sucede todo lo mal a mi?

- ¿quieres sentarte? — asentí con mi cabeza, Rafael abrió la puerta del pasajero de su auto y me subió en él.

Dio la vuelta y se sentó en su lugar, encendió el auto para que el aire encendiera para hacerme sentir mejor.

- ¿ya te sientes más tranquila?

- un poco

- ¿que te sucede Megan?

- Rafael.... yo... no sé realmente si tengo una relación o no — me miró confundido — hace unos meses atrás se mudaron unos nuevos vecinos a la casa de al lado, había un chico, comenzamos a hablar y ese chico me gustó desde el primer momento que lo vi, pasaron los días y alrededor de 2 semanas y medias después, no sé que me sucedió con él... le entregué lo más valioso que tenía, mi virginidad, él se fue a Texas para estudiar y la comunicación comenzó a desvanecerse, vino de vacaciones de Thanksgiving, le dijimos a nuestros padres y estos no nos querían juntos por la diferencia de edad, supuestamente eso dijeron, así que prometimos que mantendríamos lo nuestro en secreto mientras cumplía la mayoría de edad y así pudiera tomar mis propias decisiones, su hermana vio cuando me llevaste a la casa y se lo comentó, esta muy enojado conmigo, me trató como si fuera una cualquiera

- eso no lo puedes permitir Megan, nadie tiene el derecho de tratarte así eres una chica sumamente hermosa y tienes un corazón enorme, ¿que edad él tiene?

- 21... y yo tengo 17, ahora quizás no querrás hablar conmigo porque soy menor de edad

- no veo el motivo por el cual debería de dejar de hablarte por tu edad, eso no tiene nada malo, te daré un consejo, no permitas que un hombre te trate como si fueras un juguete, eres un valioso tesoro que no cualquiera puede tener

Estuvimos platicando por varias horas, Rafael era un hombre encantador. Fuimos a comer algo y su madurez me impresionaba. Pensé que al saber mi edad se volvería como un loco y se iría corriendo de allí, pero al contrario, resultó ser compasivo y un buen consejero.

Volví a mi casa ya que Logan necesitaba su auto para hacer unas cosas. Me encerré en mi habitación pero esta vez me sentía muchísimo más tranquila, ni siquiera estaba pensando en Troy.

Respiré profundo y me recosté en mi cama. Cómo era posible que la vida de una persona cambiaría en un abrir y cerrar de ojos. Unos meses atrás vivía feliz, sin ninguna preocupación ni sufrimiento, y ahora, era todo lo contrario, sentía que el cielo se me estaba cayendo encima y que todo era por una misma razón, una sola persona, Troy.

Recibí un mensaje.

~ espero que te sientas mejor y que nuestra conversación te haya servido de algo, sabes que aquí estaré siempre que me necesites

~ gracias Rafael

Creo que mi vida volvería a dar un giro de 360º, ¿que me espera en mi futuro?

¿Acaso Megan decidirá olvidarse de Troy y darse una nueva oportunidad?

No se pierdan los próximos capítulos!!

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