WHY DON'T WE LOVE US?

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Capítulo 4. CAN WE STILL BE FRIENDS

ANDY

Desperté con los ojos hinchados y rojos. Me alisté para la escuela decidiendo ponerme un pantalón ajustado que está roto de las rodillas, un suéter gris con escote en los hombros y unos vans del mismo color.

Al salir de casa ignoré a mi madre, ya que si no se me haría tarde, solo le dije que esperaba charlar con ella al llegar.

En el colegio no hablé con Christina y noté que Zach no asistió. Me encontré con Elliot y el me hizo compañía, supongo que mi soledad daba lastima. En fin, acabó el día que parecía eterno y llegó la hora de enfrentar lo que me daba temor: el tema de mi padre.

- Ya llegué mamá - di un paso dentro, supe que se encontraba allí ya que su carro estaba frente a casa.

- Qué bueno hija, ¿de que querías hablar? - dijo despreocupada y con una enorme sonrisa de buena madre. Llegué junto a ella a la cocina, estaba de espaldas a mí.

- De mi papá - dije sin pensármelo dos veces. Se dio la vuelta quedando de frente a mí, en su cara se veía pánico y tenía los ojos abiertos como platos.

- Mi vida, no creo que sea... - No terminó su oración ya que la interrumpí.

- Me cansé de que me mientas a la cara, mamá. Escuché algo que no debía escuchar, pero si debía saber y quiero que lo aclares - dije mientras hacía movimientos con mis manos.

- No es momento para eso, Andrea - tenía los labios formados en una perfecta línea recta. Se dio la vuelta quedando de nuevo de espaldas a mí.

- Ah, si no es ahora, ¿cuándo? - escupí de forma filosa y grosera.

- Nunca será tiempo -

- ¡Vamos Verónica! Ya tengo la edad suficiente como para enfrentar las cosas - dije recordando lo que ayer mencionó Zach - soy lo suficiente madura para enfrentar la realidad - esto último lo añadí más para mí que para ella, quería convencerme de que eso es verdad.

- Esta bien, ¿quieres saberlo? - me preguntó exasperada. Solo asentí esperando cualquier cosa - Primero dime, ¿qué sabes? -

- Está vivo - afirmé - es todo, sé que está vivo -

- Si, lo está. Pero no en las mejores condiciones - Esas últimas palabras solo generaron que el enojo en mi creciera. Esperé a que agregara algo más pero solo se quedó callada.

- ¡En serio! ¿Como te lo puedes tomar tan a la ligera, mamá? ¿no te das cuenta de cuando tiempo estuve deprimida por no tenerlo a mi lado? -

- Te dije que no era el momento Andrea. -

-Nunca será el momento y me acabas de dejar muy claro que las cosas seguirán así, lamento decirte que no me quedaré con los brazos cruzados. Investigaré por mi cuenta - Se quedó callada, ignorando mis palabras.

Sin embargo yo solo me dirigí a mi cuarto donde me la pasé toda la tarde encerrada, mi mamá tocó algunas veces para poder hablar pero ya era demasiado tarde, el daño estaba hecho y juré que las cosas no volverían a ser como antes.

...

- Por favor escúchame - Christina llegó y dijo agitada. De nuevo es lunes; ha pasado una semana desde que surgió la discusión con Zach y no había hablado con ninguno de los dos, hasta ahora.

- Lo hago - contesté mientras miraba mi libreta de orientación en la que tenía más dibujos que nada. El maestro no asistió a la escuela, por lo que tenemos clase libre y decidí quedarme en el aula para tener más tranquilidad. Ya que esta es la última semana de clases, todo estaba muy relajado y solo acudíamos al colegio para obtener nuestras notas finales.