Las siguientes semanas pasan en un instante.
El trabajo mantiene a Jimin a la fuga, pero nunca ha estado más relajado.
Las cosas con Yoongi van bien. Hablan entre ellos casi a diario, ya sea conversando o hablando por teléfono cuando su horario lo permite. Yoongi ha sido tan tranquilo como siempre y poco a poco, Jimin comienza a abrirse al mayor también.
En lugar de conversaciones superficiales, comienzan a hablar de sí mismos. Y Jimin no solo disfruta de tener a alguien con quien contar acerca de su día, también le gusta escuchar las historias de Yoongi.
Le gustan los pequeños detalles que conoce sobre el otro, como bebe café solo todas las mañanas a pesar de que no le gusta el sabor y cómo ama a Kumamon con pasión. El contraste entre su apariencia y su personalidad es bastante entrañable.
No es el hecho de que alguien esté conversando con Jimin, sino el hecho de que es Yoongi lo que lo hace tan divertido.
Hace tiempo que abandonó la idea de que su relación sea un negocio único. Con cada conversación que compartían, la confianza de Jimin crecía. Él sabe que hay una posibilidad de que esté equivocado, pero siente que sus conversaciones son genuinas. Él confía en Yoongi.
En poco tiempo, Yoongi logró colarse en el corazón de Jimin. Y está contento de haber hecho un amigo en ese ridículo sitio web. O al menos, considera a Yoongi un amigo.
Sin embargo, no es el mismo tipo de amistad que tiene con Taehyung.
Taehyung siempre ha sido su refugio seguro. Él conoce a Jimin como nadie más lo hace. No necesitan hablar para saber lo que siente el otro, pueden confiar el uno en el otro incondicionalmente y son el mayor apoyo mutuo. Es el hombre más afortunado y vivo que creció con alguien como Taehyung como su mejor amigo. Él realmente ama al idiota.
Pero su relación con Yoongi es totalmente diferente.
Mientras Taehyung lo envuelve en un consuelo tranquilo, Yoongi prende sus sentidos. No pasa ni un solo día en el que Jimin no se sienta emocionado de ver sus mensajes, escuche su voz y se ría de sus estúpidos chistes. Esta picazón nerviosa le recuerda cuánto quiere volver a ver a Yoongi, cuánto quiere pasar tiempo con el mayor y llegar a conocerlo aún mejor.
Con Taehyung, Jimin nunca se ha sentido así. Él quiere pasar tiempo con su mejor amigo, por supuesto que sí, pero nunca sintió esa extraña sensación de hormigueo en el pecho.
Jimin está feliz. Yoongi lo hace feliz. Más feliz de lo que ha sido en mucho tiempo.
Es sábado al mediodía y su reunión de negocios fue cancelada en el último minuto, por lo que Jimin tiene el resto del día libre.
Relajarse y no hacer nada es agradable, pero han pasado tres semanas desde la última vez que vio a Yoongi y ese hecho lo entristece.
Taehyung está ocupado con su nueva colección hoy en día, por lo que tristemente se ven menos el uno del otro, lo cual nunca fue demasiado para empezar. Sin embargo, se mantienen en contacto a través de Skype.
De todos modos, con Yoongi es un poco diferente. Quiere ver su cara otra vez, quiere ver la linda sonrisa gomosa y el brillo travieso en sus ojos cuando se burla del más joven. Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que se vieron.
Sin dudarlo, Jimin marca el número de Yoongi y espera a que el anciano responda.
"Oye, Jimin" Dice Yoongi, sonando sin aliento "¿Ya terminaste tu reunión?"
"Nah, fue cancelada" Jimin hace pucheros y se extiende en su sofá.
"¿No es eso algo bueno?" Pregunta Yoongi, riéndose por el malhumorado tono de Jimin.
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thank you daddy | yoonmin | traducida
FanfictionJimin solo quería tener a alguien con quien hablar después de sus días estresantes en el trabajo, pero puede haber encontrado algo aún mejor. Todos los créditos a su autora original SnAnYu de la página archive of our own.