//Capitulo 17//

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Pov. Tn

Al ingresar al departamento, me hacia ala idea de encontrar a Suzy enojada, mientras me recriminaba por mi falta ala cena de esta tarde. Pero no fue así...

Una vez dentro, pude sentir una presencia la cual supuse que seria Suzy. Pero al girar mientras pedía disculpas, fue mi sorpresa al encontrar a mi hermano en la sala sentado mirándome fija y detenida mente. !Demonios! otra cosa que olvide el día de hoy.

- Jun...¿a que hora llegaste? - pregunte, acercándome ala sala

- Un par de horas - su tono de voz era serio, muy distinto al de esta mañana

- ¿Quieres algo de beber? - pregunte en mi intento por suavizar el ambiente tan tenso en el que me encontraba

- No

Fue lo único que dijo, sin cambiar su expresión. Yo asentí al momento que buscaba con la mirada a Suzy, ¿donde demonios estaba?

- Si buscas a tu amiga, debo informarte que salio - mi vista de inmediato dio nuevamente a Jun - con Tomi

Trague en seco al escuchar ese nombre, eso quiere decir que Suzy le contó algo y por eso de su actitud. Lo observe con cierto temor, aun no estaba preparada para contarle.

- ¿Lo sabes?

- Eh estado esperando ah que tu me lo digas

- De acuerdo - dije rendida - toma asiento - señale el sofá, Jun acato lo que le solicite al igual que repetía su acción sentándome al lado suyo

- ¿Y bien?

Lo mire escasos segundos para luego soltar un suspiro y dirigir mi vista al piso. No tenia el valor suficiente para contarle todo y al mismo tiempo mirarlo, sin no sentirme miserable.

Comencé a hablar, le conté todo, desde el día de mi llegada a E.U, su rostro cambiaba continuamente de expresiones. Pasaba de una sorprendía, enojada, desconcertada y por ultimo una triste.

Esa mirada que no paso desapercibida ante mis ojos, le conté sobre la muerte de mama y del por que estaba viviendo con Suzy y Tomi. Al terminar, Jun no pudo aguantar las lágrimas. Lloro a mares, debo decir que nunca lo había visto de esa manera, el siempre era el fuerte de los dos.

Pero...hoy era diferente y era de comprender, no era fácil asimilar la muerte de un ser querido y mucho menos de quien te dio la vida. Sentía mucha pena por el, hacia años no la veía y claro estaba que nunca mas lo aria.

Después de un par de horas tratando de consolarlo, entre lágrimas, lamentos y muchas otras cosas. Pudo tranquilizarse y de esta manera pude darle una taza de café, para seguir con la platica no tan gustosa.

- ¿Estas mejor? - asintió, dándole un sorbo al café

- Entonces...ese niño ¿es nuestro hermano?

- Si

- Y ¿el padre?

- En Canadá - dije un tanto molesta

- Nunca creí que fuese un mal sujeto, como para no estar al pendiente de su hijo

- Temo decirte que no lo conoces del todo como yo

- Entonces ¿te estas asiendo cargo de el tu sola?

- Suzy me ayuda en mucho, bueno en la mayoría de las cosas. El lo cuida, mientras yo trabajo

- Ya veo - su tono era un tanto preocupado y no muy convencido

- ¿Que pasa? - pregunte al ver que no le agradaba mucho la idea

- Nada

- Anda, Dime - lo aliente

- Bueno, no estoy del todo cómodo con que te agas cargo del niño

- ¿A que viene eso? - pregunte algo ofendida

- Siento que no estas del todo calificada para hacerte cargo de alguien y menos de un niño

- Lo eh cuidado bien estos últimos meses - me queje a mi defensa

- Con ayuda - reprocho - pero que sera de ti y de el, el día que Suzy tenga que irse - suspira - Mira ____, eres mi hermana y te quiero mucho, pero precisamente por que eres mi hermana te conozco muy bien y se que no puedes cuidarte tu sola, mucho menos podrás acerté cargo de un niño

Baya, eso si que dolió. No tanto lo que dijo, si no como lo dijo.

- Jun, soy lo suficiente mente adulta como para cuidar de el. Además si no soy yo ¿quien? ¡Dime! Su padre no esta, su madre tampoco, familiares, solo tu y yo. Y no creo que dejes todo en Corea por el

- No, pero tu si

Lo mire confundida ¿a que se refería?

- ¿Que?

- ____, tu lo as dicho, no le queda nada aquí, y a ti tampoco. Nada los retiene, en cambio en Corea nos tienes a nosotros. A papá, jungkook, Mery y a mi. Sin contar a nuestros tíos y familiares que son parte de nuestra familia. Y sin duda, aceptaran a Tomi como parte de ella - espeto con cierto entusiasmó, aun que aun con los ojos visible mente hinchados, al ver que yo no decía ninguna palabra al respecto prosiguió - o es que ¿acaso no quieres lo mejor para el?

- Claro que deseo lo mejor para el, es por el que estoy aquí, pero... Tengo miedo Jun

- ¿Miedo? - pregunto - ¿Miedo a que ____?

- Temo que los cambios tan repentinos, no le hagan bien

- Pero si Tomi es aun un niño

- Precisamente por que es un niño, pienso mucho en el. Podría tal vez, no se, causarle un daño psicológico o algo por el estilo o que se yo - exclame preocupada ganando me una mirada de incredulidad de parte de el - no me mires así - exprese molesta

- ____, no pasara nada, te lo prometo - coloco una mano en mi hombro - no estarás sola. Todos te apoyáremos

Suspire pesada mente, nunca me gusto tomar responsabilidades de ningún tipo. Y Jun lo sabia perfectamente, en otra ocasión u viera corrido a el, para pedirle ayuda o peor aun. Suplicándole que se quedase con Tomi.

Pero en este caso no era así, tenia la oportunidad de pedírselo justo en este momento. Pero...Ninguna palabra salia de mi boca, era tiempo de madurar, de eso estaba consciente, además de que no podía hacerle eso a Tomi. El se había encariñado y acostumbrado a mi, así como de igual manera yo con el.

La propuesta de Jun era similar ala de Taehyung. Tendría a todos Apoyándome y viviría en el lugar donde siempre quise y al cual fui negada a estar por culpa de mi madre. ¿Que mas podía pedir?

- Lo pensare - ante mi respuesta Jun sonrió en modo de satisfacción, era lo que quería oír - pero no me presiones ¿quieres? Aun tengo que arreglar muchas cosas si quiero partir, no puedo dejar nada que me ate aquí

- ¿Te refieres alas pertenencias de mama?

- Si, tengo que vender la casa y el auto. No los necesitaré estando en Corea, pero el proceso es un poco largo, además del pasaporte de Tomi. Ahh - exclame de tan solo pensarlo - Son muchas cosas - el sonrió - disfrutas mi sufrimiento ¿verdad?

- No, solo me alegra ver lo mucho que te preocupa Tomi. Pareces una auténtica madre

Sus palabras me dieron alegría, pero al mismo tiempo mi pecho se oprimió.

No te olvidéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora