Fate/Blood Road

Capitulo 1: Noche de luna llena

Habían pasado 4 años desde que me fui de mi país Ecuador para poder estudiar el mundo de la magia mas a fondo, desde rituales antiguos hasta magia moderna en la asociacion de magos pero ahora estoy de regreso a mi hogar por una simple razón descubrí que hay una forma de hacer cualquier deseo realidad pero tiene sus sacrificios se llama la guerra santa por el grial, una lucha donde espíritus antiguos conocidos como servants luchan entre si por el, no tengo mucha mas información al respecto pero se que puedo hacerlo y ahí estaba yo en un aeropuerto de Alemania con rumbo a mi hogar, en un frio día solo pensaba 1 cosa en todo el trayecto "¿Qué clase de servant voy a invocar?" mientras tanto en otras partes del mundo sabia que el resto de magos ya estaban mas que preparados para esta batalla tan peculiar, según las reglas solo pueden ser 7 masters en total pero sabia que si me daba prisa podría ser uno de los estos magos, pocos son los magos que se atreven a entrar ya que conocen sus riesgos mas altos o simplemente un puñado son los que conocen de su existencia decidí dejarme de preocupaciones y empecé a dormir en el avión preparandome para lo que ocurriera.

En otra parte del mundo los demás magos se congregaban buscando a los mas indicados para esta guerra santa y junto a ellos la iglesia que también tenia en la mira el santo grial y como en una pequeña iglesia del norte de Argentina lo planeaban, en ella un sacerdote rezaba en paz y quietud cuando fue interrumpido por uno de sus dicipulos que con emoción dijo -Padre hemos encontrado el catalizador perfecto- Con duda en su rostro el viejo cura vio al muchacho y le dijo -Pues no hay tiempo que perder hijo mío, esta puede ser la guerra santa mas grande de todas y los Rulers deberían aparecer pronto- a lo que el joven contesto -Como ordene Padre Tadeo-

Yo por mi parte llegue a mi país muy cansado por la tarde del día siguiente de partir pero no era momento de descansar tenia que preparar todo para el ritual pero sentía como alguien o en su defecto algo me observara y me asechaba apenas baje del avión el sujeto pensaba que mi magia era débil o que seguramente era un mago inexperto pero se equivocaba, tome un taxi en el aeropuerto para dirigirme hacia mi casa en la zona norte de la capital y aun así podía percibirlo en cada segundo que pasaba pero eso no seria un impedimento esa noche haría la invocación para cumplir mi deseo, al momento de llegar a mi casa vinieron a mi mente de golpe fragmentos de recuerdos de antes de irme pero había mas cosas, cosas que no debían estar en mi cabeza la primera visión fue de una espada sobre mi cabeza seguido por la imagen de un arco de luz, tome mi cabeza en señal de dolor tratando de concentrarme en meter la llave en la cerradura con trabajo lo logré y al momento de entrar el dolor paro fue un alivio, en un impulso natural apreté el interruptor de la luz pero no encendió era algo obvio pues no había estado ahí en años pero después de unos segundos la luz encendió lo que me sorprendió mucho y me hiso despertar dudas
-¿Cómo es que hay electricidad aquí?- pero no importaba me encargaría de ese asunto despues pero ahora tenia que preparar todo y aunque aun sentía la presencia de lo que me había seguido hasta mi casa pero el echo de aun no se atrevía a acercarse me causaba aun mas preocupación, "¿Que estara planeando?" Pense, asi que mientras entraba prepare una barrera magica para evitar que intentase algo asi que pude estar mas tranquilo, mi hogar estaba lleno de reliquias y objetos antiguos que mandaba alli durante mis viajes pero decidí hacer la invocación en mi estudio ya que la presencia de magia por las reliquias invaluables que se encontraban ahí era superior, desde escrituras mágicas hasta reliquias guerreras de viejas civilizaciones pensaba que seria lo mejor para usarlos como catalizadores, era bueno estar en casa y solo quería relajarme así que prepare el circulo para el ritual y me fui a dormir, fue una pésima idea no pude descansar nada pues los sueños eran las mismas imágenes de las visiones que había tenido hace un rato por suerte la alarma de mi teléfono me despertó 10 minutos antes de la media noche, tenia tantos nervios que me senté durante 5 minutos enteros pensando ¿Y si no funciona? Pero me arme de valor apenas sonó el timbre de la media noche cargue todo mi poder en mi mano derecha y abierta señalaba hacia el circulo y empecé a recitar "Antiguo guerrero por favor permíteme solicitar tu fuerza, tu espada y tu lealtad para cumplir este deseo que tanto ansia mi ser por eso yo te invoco aquí y ahora", pude ver como luces empezaban a aparecer rodeando el circulo me sentía tan feliz y agotado ya que mi poder estaba dirigiéndose hacia la invocación, de pronto oí como una ventana se rompía y algo corría hacia mi, sin duda la barrera habia sido penetrada entonces apenas logre ver como se abrió la puerta del estudio vacié un cargador entero de una 9 milímetros en la sombra que intentaba irrumpir en el ritual, nunca fui muy bueno en el combate cuerpo a cuerpo así que tenia muchas armas de fuego escondidas por toda la casa, pero al momento en que vi caer el cuerpo de la figura que me seguía y me arrodille exhausto mi única satisfacción era saber de que la invocación aun estaba en curso y que el servant al otro lado del muro de luz me ayudaría a alcanzar mi objetivo pero de pronto la extraña figura se levanto en una furia para atacarme que al momento yo de tanto cansancio no pude reaccionar me negaba a aceptar ese destino, esa persona quien sea que fuera quería hacer correr mi sangre, de pronto un agudo tajo le arranco la cabeza de un golpe al acercarme pude verlo bien, no se trataba de alguien que haya conocido antes talvez la asociacion de magos se entero de esto y prefirieron no correr riesgos. En ese momento una voz de mujer sonó a mi detrás diciendo -Entonces tu eres mi maestro, es un honor, ¿Cuál es tu nombre?- yo conteste -Me llamo....Erik-

Fue en ese momento donde la mirada fija entre ambos junto con la luz de la luna que entraba por la ventana cerraba el contrato entre mi servant y yo, sin saber lo todo lo que me esperaría en esta guerra santa por cumplir mi deseo.