Tan cerca

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Tarde en la que la casualidad se alinea en compartir de palabras. Un extraño y otro hablan, trayendo al fin cierta verdad. Dando paso a la amistad, como otoño da al invierno.

El tiempo hace estragos, momentos buenos otros amargos y hoy aquí estamos, y mañana nos vamos. Pero antes de partir, tengo algo que has de oir.

Una estrella que brilla desde donde la vemos, más no donde está. Una llama fatigada que al viento sucumbe sus palabras tristes, con profundidad resurgen y no encuentras vocablo que le de lumbre.

Aserrismo al masoquismo, no sale del rosal. Pues una flor que lo evade no lo para de llamar. Puede ponerle un cinturón a la tierra en 40 minutos, más el jugo de sus pétalos lo han hecho olvidar el correr.

Donde la vejez carece de conocimiento y los locos la sobreabundan. Cuando una flecha no vuela, está guardada en su funda.

Gran amigo que te escribo, fuerte base te protege. En tu rey, hermano y sirviente, nunca faltara el abrazo. Si la infula nos invade o el ego nos separe, que estas palabras nos unan, nunca te voy a olvidar.

De Consejo, confidente eres. Palabras sabias te rodean, pero con olas te mareas. Crece el miedo en la marea y la luna en su pecera.

Con que abriera sus ojos y viera, un mundo a sus pies tuviera. Pero un mundo es relativo, cuando el cosmos el desea. En su mente te recrea, triste inaudito final.

Como veterano en guerra mítica, duende y hada morirán. En la noche cierra todo, pon pestillo, ponle broche.

Firma en latidos, quien fue.

La relatividad del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora