Los recuerdos que dejaste [PAUSADA]

El dia en que te abrí mi corazón

Bueno aquí estoy de nuevo, contándoles mi vida a ustedes extraños, empezaré.
Ya era domingo el día en que iría a la casa de los nuevos vecinos, yo realmente ya no quería ir, ya que supe que iría casi todo el barrio, pero por mas que decía que no quería ir mi madre me obligó, realmente me sentía nerviosa yo no quería estar ahí, rodeada de muchas personas a las cuales casi ni conozco, sin ganas fui a la casa de los nuevos vecinos todos los hombres y niños estaban afuera en el patio asando carne y jugando, dentro de la casa estaban las señoras y jóvenes que por su irresponsabilidad eran madres solteras, yo estaba en la sala sentada, mirando mi celular cuando de pronto la naturaleza me llamaba, ya no podía aguantar mas así que busque el baño, al salir de el caminaba por un pasillo que de lado a lado tenia fotos de aquella hermosa familia, quien diría que aquel joven serio si sonreía, pero a como caminaba su sonrisa desapareció y aquella hermosa joven a su lado también... Acaso ella...
-ella es mi hermana pero murió hace año y medio eramos mellizos y no lo sientas por su muerte que se que eso dirías
Estaba muy nerviosa, tenia miedo también y a lo único a lo que reaccioné fue a irme de ahí.
Se había acabado la fiesta, ya mi familia se despedía ya que era tarde y mañana habría clases.

A la mañana siguiente era hora de entrar a clases yo estaba sentada sola, justo cuando la anciana de la maestra iba a iniciar la clase tu entraste por la puerta súper rápido
-¿quien eres tu jovencito?
-amm yo soy el nuevo
-¿tu eres ángel?
-si, ¿ahora donde me siento?
-sientate por allá junto con aquella señorita
-mmm esta bien
Caminabas hacia mi, en verdad no pensaba que me hablarías así que no le tome importancia hasta que...
-tu de nuevo, no te cansas de seguirme
-¿perdón? Fuiste tu el que se mudo a un lado de mi casa
-jajajajaja por favor niña solo bromeo, aunque se que te soy irresistible de ver
-eres tan gracioso deberías ser payaso
Los dos reíamos lo que ocasionaba que la maestra nos callara a cada rato, era hora del receso y yo me quede en el aula sola escuchando musica, pensé que ángel se quedaría también ya que como era nuevo no conocería a nadie pero me equivoqué, el era muy popular, el ya había hecho muchos amigos, mientras yo me quedaba sola en el aula, con miedo de ser atacada de nuevo, me recostaba en la mesa mientras escuchaba musica cuando de pronto sentí un fuerte golpe en la espalda, era katrina la chica que normalmente iniciaba a molestarme
-oye katrina ¿puedes dejarme? Por favor
-que porque, ¿la bebé ya quiere llorar por un simple golpecito?
-solo dejame, no te he hecho nada
-como de que no me haz hecho nada estúpida, estas coqueteando con el que pronto sera mi nuevo novio, quien diría que también eres una zorra
-¿que? Yo no le estoy coqueteando
Ella me dio una fuerte bofetada
-no me importa, hoy hay taller lo que significa que te quedaras hasta tarde, te esperare y te daré una lección, cuidate ¡zorrita!.
Muchos dirán "falta al taller" "no vayas" "ve a casa" sinceramente eso quisiera pero ya estaban a punto de llamar a mis padres por mis faltas en el taller, era mi último aviso así que era obligatorio presentarme, se me había olvidado, con la fuerza de la bofetada me golpeé la frente con la pared, lo se soy torpe, además con mi tono de piel se notaba rápido un golpe.
Ya habían regresado al aula para continuar con las clases ángel me hablaba pero lo ignoraba ya que lo único que pensaba era en como iba a escapar de katrina y su grupo de "amigas", ya estaban a punto de terminar las clases y ángel no estaba había salido unos minutos antes pero había dejado su mochila, había sonado el timbre de salida y ángel no volvía, comencé a guardar mis libros en mi mochila cuando de pronto alguien pone una paleta en la mesa, junto con una bandita
-no se con que te golpeaste, pero ponte esto y come esto también, me iré a mi casa ¿también te iras?
-amm no, tengo taller y no puedo faltar
-bueno yo me voy
-gracias por eso
-si como sea
Camine al taller de dibujo y mientras caminaba tuve una idea, me quedaría hasta tarde en el taller, si, tal vez saldría cuando casi obscureciera pero saldría ilesa ya que katrina se iría, estaba a punto de terminar el taller eran las 4 pm así que me acerqué a la maestra y le dije que me gustaría quedarme para ayudar a decorar para el evento de mañana, ella dijo que si así que pusimos manos a la obra, todo había quedado hermoso, se me había olvidado que debía cuidarme
-muchas gracias por ayudarme, yo sola no iba a poder
-no hay de que profesora, bueno debo irme son las 6:30pm y ya esta obscureciendo, la veré el miércoles, adiós
-adiós y ve con cuidado niña
Iba caminado faltaban unas cuantas calles para llegar a casa pero de pronto comenzó a llover así que comencé a correr, tome un atajo y cruce entre un parque en vez de pasar por un lado de el, estaba a punto de salir de el cuando algo o alguien me jala fuertemente del brazo y me tira al lodo
-¿creiste que te habías salvado? Lo siento cariño, chicas vamos
-no katrina por favor no
Ellas comenzaron a golpearme muy fuerte, eran 5 contra mi no podía defenderme, ese momento fue eterno para mi ellas se habían ido y yo quede sola tirada en el lodo sangrando y derramando lágrimas, a como pude me levante y me senté en una banca cercana, ¿porque ella hace eso si antes eramos tan unidas?, yo no sabia el porque...
-¿porque estas aqui?
-puedes dejarme por favor
-no, tu familia fue a mi casa a preguntar si te habíamos visto, yo les dije que te habías quedado en un taller hasta tarde
-¿saliste a buscarme?
-no, solo salí a caminar un rato
El saco su celular y apunto la luz de la lámpara hacia mi
-¡quita eso de mi cara!
-¡¿por dios quien te hizo esto?! ¡Estas sangrando!
-nadie dejame- sin querer comencé a llorar- solo es que ya es normal en mi vida que me pase esto
-no es para nada normal, ¡cuentame desde cuanto te hacen esto!
Lo mire a los ojos parecía preocupado, así que comencé a contarle
-creo que todo empezó cuando inicié la secundaria yo y katrina éramos muy unidas pero ella dejó de hablarme y comenzó a juntarse con malas personas contaba cosas de mi que no eran ciertas pero cuando trataba de remediar todo ella y las otras chicas me golpeaban, al principio solo eran insultos después empezó a golpearme, ella había cambiado, ella con el paso del tiempo se volvió popular y todos querían hacer lo mismo que ella así que también comenzaron a molestarme, decidí aislarme de todos... Todo esto es muy difícil para mi, en ocaciones no puedo soportarlo y quiero que me golpeen tan fuerte hasta acabar con mi existencia
-¡NO DIGAS ESO! -el me abrazo muy fuerte- ¡no lo digas por favor! ¡No lo digas! ¡No lo digas! ¡No lo digas...! -el había comenzado a llorar.
En ese momento no entendía el porque me abrazaste y lloraste como un niño pequeño que perdió su juguete favorito pero sinceramente me sentí protegida a tu lado...
Y fue así, como por primera vez conté lo que sentía en mi corazón...