Quería agregarle un poquito más de sazón a esa calabaza y me decidí a escribir lo que pasó una vez llegaron a casa de Kirito.
Espero que les guste mucho y disfruten más de este dulce escrito.
Por cierto estoy haciendo una pequeña Asuna princesa calabaza y cuando por fin la termine la subiré en mi instagram, que puedes encontrar en la información de mi perfil.
Bueno, creo que eso es todo lo que tengo por decir y ahora sí los dejo con mi delicioso postre:
¡Buen provecho!
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Asuna se bajo con cuidado y se retiró el casco para dárselo a Kirito.
—¡Te amooo! —gritó a todo pulmón, ocasionando que aquel chico con semblante serio y esa noche escalofriante, sonriera como bobo, hechizado por sus dulces palabras.
—Parece que hoy tienes mucha energía...
—Se llama felicidad Kirito-kun —tomó su mano con timidez.
—Uhm... con que es eso —sonrió con picardía— Espero que esa felicidad sea suficiente como para tenerte despierta toda la noche.
—¡Pervertido!
—Yo no he dicho nada indecoroso subcomandante —rió.
—Mooo, ¡kirito-kun!, ¡Concéntrate en abrir la puerta!
—Primero te ayudaré a limpiar esa tarta de calabaza y después...
—¡Baka, baka baka!
— Te extrañé demasiado Asuna —la miró a los ojos— No volveré a dejarte tanto tiempo— acercó su mano hasta su mejilla— yo...
Ella lo besó, acallando sus preocupaciones, llenando su boca del dulce amor que su corazón derramaba.
— A-asu... —la miró sorprendido, con un ligero rubor sobre las mejillas —Sabes a calabaza.
—Menos mal —rió—Entonces si ha quedado un poco para ti.
—Si, así parece —la tomó desprevenida y cargó en brazos, terminando de abrir la puerta de un golpe con su pie.
—¡Ki-kirito-kun! Ten cuidado o tus padres...
—Tranquila —sonrió— Mis padres no está en casa y Sughu tampoco.
Asuna rió nerviosa desviando su mirada.
<<Pensé que esto solo pasaba en las novelas de amor>>
Asuna en estos momentos ——> O////O <—— pena extrema.
—¿T-te hiciste más fuerte durante está semana? —tenía su respiración agitada y el calor empezó a desplazarse por todo su cuerpo. Con su mano derecha trató de echarse aire, pues necesitaba enfriarse con urgencia o comenzaría a confesar sus pensamientos más vergonzosos —Q-quiero decir que... —agachó su cabeza y la escondió en su cuello —¡Hueles a manzana! —olisqueó un par de veces más y después probó con la punta de su lengua —¡Sí!, ¡Sabes a manzana!
Kirito rió sin poder detenerse, bajándola con cuidado sin apartar un segundo sus ojos de ella. No todos los días tenía la oportunidad de presenciar tanto atrevimiento de su parte, ni mucho menos verla en un estado tan encantador; cubierta por un postre delicioso y gritando a los aires que estaba hecha solo para él. Para comerla como más le apeteciera en esos instantes.
Ella se sonrojó tanto como si fuera la primera vez que declaraba sus sentimientos, como si esa noche no tuviera el control de sus acciones y sus locas emociones se le escaparan por todos lados, negándose a regresar a su corazón.
Cerró la puerta de su casa, sin quitar el gesto seductor de su boca, aun con la sensación amielada en sus labios y deseosos de más dulce calabaza.
—¡Asuna! —se giró en su dirección— ¿Podemos... —sus palpitaciones eran un concierto en plena primavera, creciendo sin ataduras por los rayos del sol. Su voz era más ronca de lo normal; más sensual que el canturreó de un canario y podía apreciarse en todo su rostro, la timidez de un niño que explora lo desconocido.
—¡Ki-ki —negó con la cabeza y se acercó hasta topar con su frente — Kazuto —susurró al aire, dejando que la suavidad de cada sílaba llegará de apoco a sus oídos — Podemos hacer cualquier cosa — sus labios se vieron curvados con delicia; tan exquisitos como un par de cerezas al alcancé de su mano, que no pudo evitar rosarlos con ternura y apretar hasta obtener su aliento.
—Eres más de lo que merezco.
—Tu eres todo lo que necesito. Eres mi prínci...
La silenció con un dedo.
—Soy tu caballero, te protegeré siempre con mi vida.
El mundo dejó de tener sentido y el universo se transformó en un par de ojos fundidos con aceró. El viento de un verano próximo impactó de lleno contra ella, sacudiendo su alma por completo.
—¡Mamá!, ¡Mamáaa!
—¿¡Yui-chan!? — giró su cabeza en todas direcciones buscando la voz de la pequeña niña —¿Dónde estás?
—¡Yui!
—¡Papá!, ¡Mamá!, ¡Por fin llegaron!, estaba tan preocupada por ustedes.
—Lo siento Yui —caminó hasta el comedor y tomó la sonda VR que estaba junto a su lap —Yo... me deje llevar y había olvidado que tu estabas esperándonos.
—Yui-chan... lo siento.
—Mamá te extrañe mucho. Estaba muy preocupada por ti —Asuna tomó el aparato en sus manos, colocándolo con extremo cuidado sobre su hombro— Después de que la tía Argo llamó a Papá y le dijo que estabas en peligro, él salió corriendo y lo único que pude hacer fue llamar a Klein-san para que lo acompañará y no hiciera una locura.
—¿Yui, que clase de padre crees que soy? — arrugó su rostro con disgusto.
—Bien pensado Yui-chan —rió— Conoces muy bien a Kirito-kun.
—Papá es muy predecible cuando se trata de ti mamá — dijo con orgullo.
—¡Las estoy escuchando!
Ambas volvieron a reír.
—Papá cuida bien a mamá esta noche, recuerda que no siempre tienen la oportunidad de estar solos y mucho menos la aprobación de la abuela para quedarse acá. ¡Hasta mañana!
—¡Espera Yui-chan!
—¿Con qué tenemos la aprobación de tu madre?—aquella pregunta la hizo estremecer.
—P-podría decirse — desvió su mirada —Me ha dado permiso para ayudarte a estudiar — tragó saliva— Un viaje de una semana puede alterar tus calificaciones y no sería bueno para el fut-turo.
—¿Toda la noche?
El bochorno inundó sus adentros y las palabras se quedaron atrapadas en su garganta, hasta que él la obligó con su mano a confrontar su rostro.
—¿D-de qué hablas?
—¿Toda la noche me ayudaras a estudiar? —sonrió victorioso.
—S-si
Y así, toda la noche estuvieron "estudiando" (◔◡◔) ♥ ♥ ♥
CURIOSIDADES:
1. Kirito se fue una semana de viaje por cosas de su trabajo.
2. Es Viernes 31 de octubre día de Halloween.
3. Kirito y Yui se tomaron el jueves para robar el premio del calabazo de Halloween y hasta el sábado a las 9:00 a.m fue anunciado a los jugadores.
4. Liz se enteró de la cancelación del evento y por eso llamó a Asuna tan angustiada.
