Las consecuencias de evitar los problemas

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Desperté y Chealsea no estaba durmiendo a mi lado, salí de mi habitación y tampoco estaban los niños, ni Mili, ni Aria. Baje las escaleras corriendo y en la mesa de la cocina estaban las llaves de Chealsea y Aria con una nota que ponía "Nos cansamos de tí". Al verlo llamé a Chealsea y saltó el contestador rápidamente eso significaba que había rechazado la llamada, llame a Aria y no contestó pero en el mensaje del contestador ahora era diferente "Hola llamaste al teléfono de Aria, ahora no puedo atenderte, deja un mensaje de voz o llámame más tarde. A menos que seas Jack, si eres tú no lo vuelvas a intentar" al terminar de oírlo por inercia dejé caer el móvil al suelo, de un instante a otro me dejé caer al suelo yo también, no tenía fuerzas para mantenerme de pie, permanecí allí, tirado, mirando a la nada y pensando ¿que hice tan malo como para que se fueran y no quieran saber más de mi?
En ese momento cerre los ojos, expire y al abrirlos y volver a recuperar el aliento vi que estaba en mi habitación, mire a mi derecha y Chealsea estaba a mi lado durmiendo. Intenté tranquilizarme. Me levanté y fui a mirar si estaban Aria y los niños. Si que estaban, solo había sido una pesadilla. Cerré la puerta del dormitorio de los niños y me recosté en la pared. Por un momento creí haberlo perdido todo. Volví a mi habitación, miré a Chealsea como dormía. Tenía en la cara una expresividad de tranquilidad, la observé un rato y comprendí que el único compromiso que me ata a ella son Simón y Daniel porque los adoptamos conjuntamente, porque el bebé que llevaba dentro de ella no es  mio y tampoco creo que su corazón piense en mi, porque se quedó muy destrozada al ver a Enrique. Ella es más de él que mía. Yo fui su ayuda para superar la ruptura nada más....soy el novio de transición.... Intenté alejar esos pensamientos y me acosté para intentar conciliar el sueño, pero fue en vano. Solo daba vueltas por la cama, cuanto más intentaba alejar mis pensamientos más lo pensaba. Cuando ya era la hora de que llevara a Mili y los niños al colegio, mire a Chealsea
-Chealsea, voy a llevar a los niños
-Vale, que te vaya bien
-¿Me acompañas?
-¿Para que?
-Para hablar por el camino
-Jack no me despiertes temprano para eso, ve a llevar a los niños anda.
-Esta bien
-Adios
-Adios-Sali de la habitación para despertar a los niños para que se alistaran para salir. Mientras esperaba no puede evitar darle más vueltas. Subí las escaleras corriendo y entre en la habitación ya corcomido por mis pensamientos-Chealsea ¿tú me amas o soy tu novio para superar la ruptura de Enrique?-Chealsea se incorporó de golpe y me miró atónita
-¿Como dices?
-Salías de la relación más importante que tenias, embarazada de él, yo aparecí en el peor momento, tú no pensabas con claridad, todo fue y es una mentira
-Jack siéntate
-No quiero
-Porfavor
-No, me niego
-Quiero hablar esto contigo como personas civilizadas, cara a cara
-Ahora nos vemos cara a cara
-Deja de ser un tozudo y siéntate aquí ya.
-Esta bien.-me senté en la cama en frente a ella y la mire fijamente-¿Y bien?
-Yo no sigo queriendo a Enrique.
-Pues entonces porque te deprimiste tanto al saber que no quería saber nada del bebé.
-¿Me dejas acabar?
-Si
-Si me deprimi fue porque no sabía cómo haría yo sola con el bebé
-No estás sola, nos tienes a nosotros
-Jack, me estás cabreando, ¿puedes dejarme acabar de hablar sin que me interrumpas?
-Lo siento
-Bien, como iba diciendo no sabía como haría para encargarme de algo tan difícil como es un bebé yo sola. Contaba con que Enrique me ayudaría si alguna vez teníamos hijos. Su negativa fue un duro golpe, pero gracias a ello me pude dar cuenta de que no estoy sola, de que te tengo a ti, a mi familia, a la tuya y los niños. Me di cuenta de lo buen padre que eres y la suerte que tengo de querernos. Este bebé no es tuyo, será algo de lo que me arrepienta siempre...pero...el siguiente te juro que será tuyo.
-Chealsea, te amo y creo que nunca antes lo había dicho tan de corazón.
-Yo también te amo-nos abrazamos y luego lleve a los niños al colegio. En el  coche pensaba cuanto me había corcomido la cabeza imaginandome cosas que no estaban, pensando que ella era de alguien como si fuera un objeto, pero es una persona, la más guapa y mejor persona (en algunos aspectos) que conocí.
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Continuación en ¿Porque volviste?

Porque tú lo valesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora