❝Missing Halloween❞ [p.j+k.t]

❝할로윈을 잃어버린❞

31 de Octubre. La fecha que todos amaban y añoraban durante meses, fecha donde todo pequeño niño deseaba festejar junto a sus padres o amigos, yendo de puerta en puerta mientras exclamaban un emocionado "¡Dulce o Truco!" a quien saliese a recibirlos.

Por ende, era normal ver como las calles iban repletas de traviesos niños junto a sus padres, con quienes pedían dulces al ir tocando de puerta en puerta. Algunos niños iban correteando por toda la vecindad junto a sus amigos, y otros solo veían desde sus hogares como los demás se divertían, tal como hacía TaeHyung o como su madre le llamaba, Tae.

El pequeño Tae miraba desde su ventana todo lo que pasaba en frente suyo, pero él no se sentía mal al ver desde dentro de su hogar la diversión de los demás, él sabía que no necesitaba de un grupo completo de amigos para poder divertirse, solo necesitaba a su preciado mejor amigo con él para disfrutar de Halloween.

TaeHyung al no ver aún aparición alguna de su amigo pegó sus labios en el frío vidrio de la ventana y de manera juguetona comenzó a crear sonidos extraños pero chistosos, tanto que él mismo había comenzado a reír divertido por lo que él mismo estaba haciendo.

❝Mi amor, ¿Un dulce?❞

El pequeño no se interesó siquiera a mirar a su madre cuando esta le ofreció un poco de dulces moviendo el tazón que los lleva, generando un pequeño revoloteo entre ellos. Tae simplemente rechazó la oferta realizando un pequeño movimiento de cabeza de lado a lado un par de veces.

Pero pronto, un chillido escapó de los labios del niño, y este, sin poder retener sus ganas corrió hacia la puerta principal de su hogar para así poder abrir esta y salir al encuentro de quién más esperaba, su único amigo.

Su madre miró con ligero susto a su hijo cuando este de pronto había decidido salir de casa, y eso apesar de que le sorprendió, le alegraba mucho el hecho de ver sonreír a su hijo, es lo que más amaba, pero eso no incluía gustarle presenciar lo que había ocurrido frente a su hogar, ella lo sabía, una vez más estaba ocurriendo, al igual que el anterior Halloween.

❝¡Jiminie! ¡Mira mira, soy un fantasmita! ¡Buuuu!❞

Por otro lado, se le oyó exclamar contento al pequeño Tae mientras alzaba sus brazos luciendo frente a su mejor amigo Jimin el disfraz que él llevaba, recibiendo simplemente la mirada algo neutra pero con ligero toque de diversión del contrario.

TaeHyung sonrió al ver como Jimin parecía haberle divertido su traje, pues apesar de que su amigo fuese alguien que transmitía seriedad la mayor parte del tiempo había aquel ligero toque divertido en él.

Y cuando Tae estuvo apunto de comenzar a alabar el disfraz de Frankenstein de Jimin, una tercera presencia a su detrás hizo que Tae inmediatamente voltease.

❝Muéstrame una gran sonrisota❞

Habló la mamá de TaeHyung mientras sostenía una tableta en sus manos con inxtenciones de capturar un par de fotos, pues ella no podía con la ternura que su pequeño hijo transmitía con aquel adorable traje.

Un gran sonrisa emocionada se plasmó en el rostro del menor, y este, miró un momento a Jimin sintiéndose aún más emocionado al pensar que al fin tendría una foto con él.

Varias fotos fueron tomadas y la mujer sonrió satisfecha al obtener lo que deseaba. Tae con el mismo sentimiento de emoción alzó su mano sacudiendo esta un par de veces despidiéndose de su mamá pues ya era hora de comenzar a pedir dulces junto a Jimin.

Su madre repitió la misma acción y observó como Tae se alejaba cada vez más. Bajó la mirada por un breve instante hacia la tableta y sonrió, quizás de manera melancólica, pero era suficiente para ella ver feliz a su pequeño hijo, eso era todo para ella.