Celos

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Y ahí estaba como cada día observándolo, cualquiera que lo viera diría que es un tipo de acosador de esos que dan miedo. Y si sus amigos se lo estaban diciendo.

— Bro..no hagas eso.. Estoy seguro que es considerado un delito — mencionaba Hansol pasando una de sus manos frente al rostro de Seungcheol creyendo así lo sacaría de su trance.
— Lo que no entiendo es, si te gusta tanto ¿por que no simplemente lo invitas en una cita? —cuestionaba Jisoo bajando el libro para mirar a su amigo que seguía en un modo stalker

— Ustedes no lo entienden... — Seungcheol dejaba salir un suspiro algo triste para voltearse y mirar a sus amigos por primera vez — Jihoon es el chico más bonito del instituto además de que siempre esta con ese.. ese  "Hoshi" — chasqueaba su lengua al tener que decir aquel apodo, ni siquiera era un buen apodo, y que si el chico supiera bailar. Él era Seungcheol el gran Seungcheol y estaba seguro que solo necesitaba un poco de atención del más bajo para que se enamorará, se casaran tuvieran 3 hijos un perro y una casa con un gran jardín, incluso lo dibujo en su cuaderno tenía todo planeado.

—Necesito solamente que me mire y con eso será suficiente para que vivamos felices para siempre— mencionaba con una sonrisa boba en su rostro aquella que solo Jihoon podría causar. —Ayúdenme a pensar como hacerlo ¿como conquistaron ustedes a sus novios?—

— Bueno con Jeonghan fue realmente fácil —empezó Jisoo apoyando una de sus manos sobre la banca — Creó era inevitable entre nosotros, pero claro empecé con flores, diciéndole cosas lindas, acompañándolo a casa .. Supongo no es difícil si esta destinado tu amor.
Lo increíble aquí es como convenció Vernon a Seungkwan, eso si que fue perseverancia.

—Oye!  Mi pequeño Boo no es difícil, es solo un poco especial y el hecho de que me haya costado casi 1 año solamente lo hizo mejor — Vernon miraba a su amigo con el ceño fruncido pero recordando tanbien lo difícil que fue convencer a Seungkwan de una cita, cuanto tuvo que perseguirlo, todo lo que gasto en flores y caramelos además de lo fastidioso que era alejar a tantas chicas de él para que su pequeño con mejillas adorables no las persiguiera queriendo matarlas.

— No puedo esperar un año. Lo quiero ahora para mi — Cheol empezaría a hacer una rabieta como un niño pequeño si no fuera porque en ese momento se le ocurrió la mejor o al menos más rápida idea que su muy desesperado cerebro se le ocurrió. — Celos — mencionó con una sonrisa traviesa, la cuál no paso desapercibida por sus amigos que soló retrocedieron un poco en sus asientos—

— Cheol.. Amigo piénsalo mejor — Jisoo coloco una mano sobre su hombro como si tratara de pararlo.
—Si si! Que tal si mejor lo saludas por las mañanas para empezar, algo lento.. — Vernon tenia un poco de miedo pues lo conocía bien, sabia que su amigo tenia buenas intenciones pero a veces sus ideas eran extrañas.

— Para nada, le daré celos. Así cuando vea que beso a alguien inevitablemente se molestara, vendrá sólito a mis brazos — sus amigos dejaban caer sus frentes contra la mesa ante la "gran idea" del pelinegro.

— Ahora solo debo buscar a alguien perfecto, no quiero besar a cualquiera— dicho esto empezó a escanear a su clase, cada rostro pero nadie le convencía. No eran lo suficientemente atractivos o bonitas para provocar al de baja estatura, hasta que volteó a ver a su amigo de ojos avellana, después de todo Vernon era el segundo más atractivo del salón, después de Jihoon claro.

Al percatarse de la mirada de su amigo Vernon no puedo evitar tensarse en su propio asiento — N-no Seungcheol.. S-sabes que Seungkwan me mataría, recibiría y me mataría de nuevo.. ¿Qu-que tal Jisoo? Estoy seguro Jeonghan lo entendería.. ¿Cierto Jisoo?  —volteaba a ver a su amigo americano en busca de un apoyo hasta que vio su asiento estaba vacío " maldito traidor" era lo único que podía pensar Vernon.

— Será rápido Vernon.. Acércate Jihoon está mirando hacía acá — el pelinegro jalo a Vernon del brazo dejando un beso en sus labios.

Si esto fuera como en las películas Vernon juraría que vio su vida pasar frente a sus ojos, cuando su lindo novio de grandes mejillas caminaba hacia ellos con un rostro que por decirlo menos denotaba cometería un asesinato doble.
Lo siguiente que vio fue como Seungcheol corría y gritaba misericordia por su vida. Oficialmente el alma del guapo mitad americano había salido de su cuerpo.

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Era la hora de la salida, todos habían guardado sus cosas y caminaban ahora cada quién a sus casas.
Jisoo de mano de su precioso ángel mientras comentaban como estaba su día y los planes que tendrían aquella tarde.

Seungkwan iba de la mano de su novio que después de una buena explicación había entendido y ahora se reía de la situación, Vernon agradecía no haber muerto ese día pero estaba seguro que su novio enojado era lo más peligroso que había visto jamás.

Y Seungcheol... Bueno el iba sólo, sobando aún su mejilla enrojecida por el golpe que había recibido de Seungkwan, no solo había fracasado en su misión ahora tenía un gran dolor por los golpes de aquel novio histérico que tenía su amigo.

Resignado a que su pequeño nunca le haría caso caminaba con la cabeza gacha hasta que sintio un pequeño tirón de su saco, detuvo su paso para mirar quién lo detenía soptendiendose al ver a Jihoon, a SU JIHOON detenerlo con esa sonrisa que robaba la respiración de cualquiera. — ¿Tú eres quién recibió la furia de Seungkwan cierto?. — Seungcheol soló ayuno a asentir porque al parecer lo golpearon tan fuerte que perdió la capacidad de hablar.

— Solo quiero decirte que no tenías que hacer algo tan peligroso para llamar mi atención — Reía el de pequeña estatura al ver como el mayor había quedado como una estatua frente suyo, saco una hoja dónde empezó a escribir algo. — Ten, llámame. Nos vemos Seungcheol— dejaba la nota en la mano del pelinegro agitando su mano antes de voltearse y partir.

Si no fuera por el dolor en su cuerpo Cheol estaría seguro que estaba soñando, miro a Jihoon caminar hasta que lo perdió de vista desdoblando el papel que le había dejado, su número telefónico.

Tenía el número de su futuro novio.

Dejo salir toda su alegría haciendo un baile extraño deteniéndose hasta que se percató estaba aún en la calle, camino hasta su casa con una gran sonrisa después de todo sus ideas no eran tan bobas como sus amigos creían. A veces los celos funcionan.