Yo estaba normal revisando imágenes, cuando imagen salvaje aparece e inspiración me poseyó . Me dije: Aoi tienes que hacer un one-shot si o si. Y aquí me ven, espero que sea de su agrado.
Advertencias: ScottEng y quizas algunos pañuelos ;D.
No veas, no escuches y solo descansa. Tus lagrimas limpiare y tus bellos ojos ocultare con tus amadas rosas. Yo caeré en la locura por ti, sigue riendo de felicidad e ignora el cruel mundo. Te protegeré hasta que mi alma desfallezca, olvida al núcleo de tu pesar. Está bien incluso si me odias, si aquello te hace sentir mejor, lo aceptare. Sin embargo, no te dejare, en las sombras te resguardare porque tu bienestar es lo único que me importa.
Un buen hermano nunca fui ni lo seré. Ante tus ojos me muestro como un monstruo despiadado, causante de tus dolores y traumas de la infancia. Aquel que solo vive para amargar tu día y que nunca te dejara en paz, aunque debes creerme que he intentado cambiar mi actitud más debo corroborar de que un hábito nunca se quita.
Aún recuerdo cuando aquel mocoso que criaste con el amor y cariño que a ti te hizo falta, te destrozo con su independencia. No sabes cuánto desee eliminarlo o mejor torturarlo con mis propias manos, verlo retorcerse en agonía mientras suelta alaridos desconsolados y luego matarlo como penitencia hacia tu sufrimiento. No obstante, sé que todavía le guardabas cariño y que si me atrevía a tocarlo no dudarías en abalanzarte contra mí.
Tú no eres débil, lo demostraste al levantarte como un gran imperio, pero este sentir de protegerte no desaparece. En tiempos atrás lo atribuía a un fuerte lazo de hermandad más el transcurrir del tiempo me enseño la verdad. Porque no es sano que te quiera solo para mí, que odie a cualquiera que se atreva a mirarte de otra forma, desearte incluso en mis más insanos sueños de lujuria y anhelar amanecer a tu lado, todos esos pensamientos me llevaron a una sola conclusión; te amaba obsesivamente.
Nosotros como naciones nunca tendremos un tiempo definido para morir por lo que la alegría, el desagrado, la disconformidad, el amor, el rencor y el dolor jamás serán olvidados de nuestras memorias. Y como tal podemos descubrir muchos sentimientos que para un humano son efímeros pero para un país será duradero. El amarte fue mi condena a una eternidad de desdicha y locura.
Tus bellos ojos esmeraldas, tan parecidos a los míos y a la vez tan distintos, me seducen, me tientan, me provocan a devorarte ávidamente como un lobo a su presa. Aquellas gemas son mi perdición pero nadie debe saberlo, solo mi conciencia y yo.
Ahora me dirijo hacia ti, luciendo mi mejor rostro de apatía, intentando ocultar todo rastro de la tormenta de emociones que despiertas en mi interior.
- Hey conejo – Sé que odias ese apelativo y por lo mismo lo digo - ¿Ya extrañabas a tu lindo hermano? - El toque juguetón es inevitable.
- Sí, claro... - Tu bella voz es dulce incluso en esta situación – Tanto que incluso podría abrazarte y besarte mientras bebemos té y jugamos con muñecas - El sarcasmo es de familia, lo reconozco.
- No pensé que tendrías esos hábitos, hermanito – Me gusta verte exasperado con mis palabras pero todavía no acabó – Aunque el abrazo y beso no suena mal.
- Ya cállate Scott y dime a que has venido. – Saboreo mi victoria al ver que estás enojado.
- ¿No puedo visitarte? Después de todo somos esposos – Cual dulce sabe esa palabra en mi boca – Y deseo consumar la luna de miel – Eso último fue un susurro inconsciente.
- Haz lo que quieras, no me interesa – Parece que no escuchaste, me alivia un poco pero también me molesta - Y por cierto....- Te oigo decir antes de marcharte a tu habitación – No tienes permitido fumar en mi casa, si quieres hacerlo vete a la tuya.- Vaya que me conoces.
- No prometo nada –Y con esa oración me dirijo a otra estancia; el mini-bar de la casa.
Y mientras voy bebiendo, sonrío y no de verdadera felicidad, sino de locura. Una locura triste y silenciosa porque a pesar de todo, mi penar solo la alivia lo que tu más detestas; el cigarro y la bebida. Estos vicios me consumirán pero suprimen mis bajos instintos ya que te amo pero no te obligare a estar conmigo.
Y aun así te cuidaré incluso si no lo necesitas, te desearé incluso si me aborreces, te amaré incluso si me odias. Porque yo, Scott Kirkland, representante de Escocia y tu esposo legal ante todo el mundo, velaré por tu bienestar y salud hasta que la muerte nos separe; este es será mi voto blanco ante ti, mi bella rosa carmesí.
◘◘◘◘◘◘
¿Llegaron hasta aquí? Pues muchas gracias por tu valioso tiempo y disculpen si quizás resulto corto.
Hasta la próxima. ♥♥♥♥
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Anhelo Silencioso
RomanceProteger es el sentimiento y acción que un hermano mayor siempre manifiesta hacia el menor. Al contrario, aquello se puede torcer y florecer en color de un rosal carmesí.