Jean

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Conoci a jean en la calle.
En un día de primavera que era especialmente frio.

El está sentado fuera de la Gobernación cabisbajo, es delgado y alto, lo se incluso aunque está sentado en las escaleras que dan al jardin, su pelo es claro,no rubio pero si un castaño dorado, aunque puede ser debido a la luz.

Mi corazón se ablanda y me dan mil ganas de hablarle... Es que se ve tan perdido, pero para cuando estoy dispuesta a hacerlo el auto ya avanzo y sólo puedo quedarme con la fantasia de saber que habría ocurrido de haber bajado y preguntado su nombre.

Quien sabe, tal vez si era Jean.

El parece un chico normal, sonrisa cálida y ojos dulces... Y su voz es extrañamente ronca, demaciado varonil para su apariencia, y es por eso que sonrío cuando me dice su nombre y aquel tono ronco rebota en mis oidos, no puedo evitarlo. 

Es tan extraña.

Mis ojos vuelven a mirarlo y de pronto me veo sumergida en sus ojos, un par de orbes oscuros que me miran con curiosidad, como diciéndome ¿Qué se supone que haces aquí?

El auto sigue avanzando y desaparece de mi campo de vision.

Está oscuro,
Y quiero volver a verlo.

Un nuevo semáforo se interpone en nuestro camino y no lo pienso dos veces.

Bajo corriendo mientras escuchó tras de mi al conductor que no puedo bajarme en aquel lugar.


Corro y sigo corriendo sin importarme si terminó sudada o sibparezco una loca frente a los ojos de todos.

Una luz parpadea sobre mi y estoy segura de que mi corazón lo hace aún más rápido.

Giro en la esquina y lo veo, sigue ahi, mirando a la nada, me hacerco lentamente tratando de recobrar el aliento.

Me siento cerca de él mientras lo miro de reojo, de tan cerca parece incluso más alto y sus ojos no son negros.
Son, azules, tan azules como el mar más oscuro.

Sonrió por puro instinto al darme cuenta que sus ojos están viendo directo a los mios.

¡Dios!

Debería estar muy nerviosa, pero su mirada no hace más que calmarme tras cada segundo que seguimos mirándonos.
Se levanta sin dejar de mirarme y podría jurar que se va a largar en cualquier momento.
Lo cual en realidad no me sorprendería.

Se para frente a mi y mi respiracion se detiene.

-Creí que nunca llegarías.

Mis ojos buscan a quien van dirigidas aquellas palabras, pero no hay nadie a la vista, sólo quedamos nosotros dos en aquellos jardines.

Vuelvo mi vista a el que ahora se encuentra a centímetros de mi rostro, tanto así que puedo sentir su respiración.

- Si, te estoy hablando a ti.

No se que contestar, o al menos no hasta que toma mi mano.

Los sentimientos me llenan mientras los recuerdos  llegan a mi como un torrente de emociones.

J-Jean... Su nombre sale como un susurro.

-Feliz aniversario.

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Ni yo se lo que escribí, aún así espero que les guste y me dejen saber sus opiniones.
De verdad AMO leer sus comentarios ❤

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