Capitulo 1

41 2 2
                                    

Era Lunes me desperté como de costumbre en mi pequeño apartamento. El sol brillaba en mi rostro la primera señal de la mañana, la habitación se inundo de luz al abrir las ventanas de mi cuarto. Me fije la hora en el reloj de pared. Eran exactamente las 7:15 . ''Perfecto'' pensé. Tome un baño rápido de 15 minutos. Mientras me peinaba y maquillaba ponía el café en el microondas, lo saqué y velozmente me vestí me hacia una pausa para tomar algún sorbo de café. Tome mis cosas, y con una sonrisa reflejada en el espejo de pared acomode mi falda gris, estire mi camisa 3/4, menton firme, y salí hacia el juzgado. Era una abogada en São Paulo. Gracias a mis estudios. Exitosamente fui reconocida en todo Brasil. Se podría decir que represento a muchos famosos. Sali de mi departamento, salude a German mi portero ''Buen día'' dijo con una expresión calida, le devolvi el saludo y entre a mi auto. Mientras pensaba en todo, mi pasado, mi gran amor. Todos esos pensamientos inundaban mi cabeza como un sunami. Lo que me hizo volver en sí, fueron las bosinas que provenian de los autos queriendo indicar que el semáforo estaba en verde... bastante enfadados. Volvi a la tierra, arranque el auto, respire hondo y seguí hasta mi trabajo...

--¡Qué puntual, Mía! - Decia Jazmín mi secretaria y mejor amiga-

-- Como siempre - dije sonriendo-

-- ¿Cómo haz pasado el fin de semana? ¿O me dirás que no has hecho naaaaaaada? - poniendo los brazos cruzados-

--¿Qué esperas que haga? Hay mucho trabajo, amiga. -dije mientras sostenía unos papeles-

-- Nunca haces nada, Mía. Tendriamos que salir. Una noche quizás conoces a chicos. Por lo menos a mí me va muy bien con Juan. Es un chico bueno y ya sabes... Como que nos gustamos...

-- Nooo.

--No. ¿qué? ¿Juan? El es un buen chico.

-- No, él no. ¿Qué hace Pedro Lanza en este caso? -dije sorprendida con el corazón en mi boca-

--Oh sí, olvide decirte él necesita una abogada urgente. Y pidió la mejor. Y bueno, Mia, te eligieron a ti para esto. --Pero... -atonita-

-- ¿Qué sucede? -preguntó con una ceja levantada insinuando que algo-

-- Nada... e... lleva esto a mi despacho. Ire al baño a retocarme el maquillaje.

--Mmmm -dudosa- Algo me ocultas, Mia.

Cuando leí esas palabras impresas ''Pedro Lanza'' mi corazón empezó a latir tan fuerte que podría decirse que casi se me sale por mi boca. Estaba tan nerviosa. Yo... quizás ... ¿Y si....? No, no podría pasar. Volvi en si. Me mire al espejo y dije... ''Nada malo puede pasar'' respire lo mas hondo posible y salí del baño. Entre a mi despacho, y empecé a hacer mi trabajo, sinceramente mi mente no estaba para nada consentrada en realidad no podía nisiquiera quedarme quieta. Hasta que me tranquilice, mire hacia la ventana, reflejaba el mas hermoso sol y recordaba esos días que enrealidad no sucedieron... todavia no puedo creer lo que me habia acontecido y pasaron 9 años. Pero sigo enamorada... como si realmente hubiese pasado... ¡Qué tonta!

--Mia aquí tus papeles. Firmalos los tengo que presentar en el... heeeey Mia. ¿Me escuchas? Mia. -Grita-

--¿Qué? -dije sorprendida-

-- ¿Acaso no me escuchaste NADA de lo que te he dicho? -decía con tono enfadado-

-- Lo siento no te preste atención. -Sosteniendo mi cabeza-

-- Yo se que algo te sucede, si no que como no soy tu amiga ni me lo cuentas. -- Si eres mi amiga... es que... no lo se- dije dudosa-

-- Esta bien. Como quieras. Aqui tienes esto, si quieres firmas, si no haz lo que se te cante. -muy enfadada-

--Ok. Tu ganas Jazmin. Pero no se lo cuentas a nadie. Luego del trabajo, prometo invitarte a casa y hablamos del tema. -dije resignada-

-- Muy bien. Asi me gusta, yo compro las pizzas. -Decía sonriendo- Luego pasó todo el día y no sabía como decirle, ¿cómo lo tomaría? ... ya... es mi amiga y en algún momento lo tenia que saber... traté de no preocuparme.

Era la hora de irnos. Tomamos nuestras cosas , riendo, hablando nos fuimos a mi apartamento. Mientras iba en mi auto...

--¿Por qué tanto misterio, Mia? -decía Jazmin mirándose por el retrvisor-

--Si, supieras amiga... -dije manejando y suspirando a la vez-

--Pero no entiendo... ¿tan importante es que nunca me lo has contado?

--Pues, no sé si ''importante'' es la palabra... quizá sería ''loco''.

--¿Cómo? -con tono de preocupación - Espera! -hizo una pausa- ¿Consumes drogas?

-- ¡¿Qué?! No, ¿Qué decís? -soprendida-

-- Bueno, uno no sabe que puede suceder en la vida de una persona, amiga... -rie-

Mientras bajamos del auto rápido por el ancia que tenia Jaz. Lo note por su impaciencia al bajar del auto, es muy impaciente en la mayoría de sus actos. No se si es malo o bueno, pero es así y será la primera persona que sabrá esto después de tantos años.

-- ¿Quieres café ? -dije dejando la cartera en el sillón -

-- Sí, sí. Rápido.

-- Bueno, bueno -dije dirigiéndome a la cocina-

-- ¿Qué era la ''gran'' locura? -decía Jazmín sin esperar más -

-- ¿Cuánto de azúcar? -evadiendo el tema-

-- No me cambies de tema -enfadada- --Okay... te cuento -resignada- Todo empezó....

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 11, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cuidado con lo que deseas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora