ÚNICO

4.9K 448 190
                                    

Domingo por la mañana, hora de ir al gimnasio del hotel, porque Erick así lo decreto ayer por la noche, mientras Joel pedía servicio a la habitación, enlistando todo lo que su novio quería para cenar.

'Erick decide casi todo entorno a Joel y él': que deben cenar, a que hora deben dormir, que ropa deben usar para combinarse discretamente; como, cuando y donde debe follarlo.

Muchos lo llaman mandilon, pero el hace las cosas que Erick le dice, más allá de que le tenga algún tipo de miedo o amenaza, porque de verdad lo ama.

Las personas ven las cosas desde fuera de una manera muy diferente a como en realidad lo son.

Erick no decide del todo que hacer, porque eso le concierne a los dos. Ambos saben que como pareja, deben concordar en lo mejor para todos.

Ayer hicieron el amor más de 10 veces, en todo rincón y en toda posición del cuarto que comparten.

El ojiverde puso una alarma para que los despertara a las 7.

Su celular sonó y el cubano, despertó enseguida, le gustaba salir por las mañanas cuando la niebla cubre las calles y el sol apenas comienza a salir, es una de las cosas que le fascinan. Quería aprovechar para ir por un café afuera con el rizado después de ejercitarse.

Joel siente como su novio se remueve en su lugar, y entreabrió los labios para decir algo, pero tenía demasiada flojera como para tan siquiera internarlo.

-Mi amor- susurra el menor mientras acomoda sus rulos.

-Mmmm?- responde mientras rodea su cuerpo con brazos y piernas, poniéndolos sobre el.

-Tenemos que levantarnos- sonríe inevitablemente.

-5 minutos...- bostezo -mas por favor- talla su cabeza en el pecho de el otro, como si fuera un gatito.

-Mierda, solo 5 minutos- cedió finalmente, y se acomodó mejor entre sus brazos.

Sin duda amaba pasar el tiempo con el, mayormente así, pegaditos.

Ambos cerraron los ojos, dejándose llevar por el silencio en el espacio y la poca luz que traspasaba el ventanal.

Había pasado ya una hora y pico, desde que tomaron 5 minutos más, el tiempo pasó demasiado rápido. Erick despertó a pocos centímetros de Joel, frente a frente, sintió su respiración invadir su espacio.

No iba a despertarlo, se veía demasiado tranquilo... Y hermoso... Dios, y tan jodidamente sexy.

Sus largas y gruesas pestañas resaltan de sus ojos cerrados, la alineada forma de su nariz, la forma perfecta de su rostro, la curva extremadamente gruesa de sus labios, que joder, lo traían hecho un imbécil.

Se atrevió a pasar su pulgar por su labio inferior, para reiterar de los suaves que se veían sus labios. No importaba cuántas veces ya los haya probado, tenía que hacerlo.

Su mano se quedó sobre su mejilla, mientras acortaba poco a poco su distancia. Hasta pegar sus labios con los ajenos.

No esperaba que despertara, el quería tener el control de su cuerpo inconsciente, totalmente.

Tomó su barbilla para abrir un poco su boca, y hacer todo el trabajo. Succionó su labio inferior, de una manera muy suave, su corazón estaba latiendo demasiado rápido, sentía nervios y adrenalina por descubrir la sensación de dominarlo por completo.

Atrapó su labio inferior mordiendolo un poco, sus labios son tan carnosos y ricos, que no se puede resistir.

Comenzó a mover sus labios a su antojo, de una manera apresurada, tanto que logró despertar al rizado.

Pasivo Posesivo ¡! OSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora