Amor Sobrenatural (C.V) [PAUSADA]

Capitulo 35

Me había quedado paralizada, no me podía mover. Parpadeaba una y otra vez para si si enverdad estaba sucediendo lo que estaba alfrente de mi.

La misma chica que derrivé en el juego de lacross estaba peligrosamente cerca de Christopher. Yo apreté el libro de Biología con todas mis fuerzas.

Osea como se atreve estar tan cerca de el, y para colmo le esta coqueteando, a millas se puede ver.

Desidida a caminar hacia ellos para poder desirles unas cuantas cosas no tan hermosas a esta estúpida.

Iba con paso firme cuando algo iso que algo se rompiera en mi. Literalmente sentí algo romperse dentro de mi. Un dolor en mi pecho apareció.

Los labios de la chica estaban besando los de Christopher.

Quería llorar, gritar, golpear los casilleros, golpearla a ella, golpearlo a el, quería matar alguien.

No quería estar ahí, quería salir de ahí lo más antes posible. Yo de nuevo agarre mis libros con fuerza que en cualquier momento se pueden romper y salí corriendo chocando con toda la gente en mi camino. No me importaba si pensaba que era la loca que sale corriendo de la escuela, no me importara saltarme las clases. Lo único que me importaba era salir de aquí.

(...)

Había llegado al bosque con mi respiración agitada y llorando como una magdalena. Yo seguiá corriendo sin mirar a donde iba, hasta que sentí una rama chocar con mi rostro. Grité un poco y me detuve. Llevé mi mano a mi mejilla y cuando miré mi mano estaba sangrado. Pero no le presté importancia, eso sanará después.

Lo que no creo es que se pueda sanar es mi corazón.

Derrepente sentí un terrible ardor en mi cuello, justo en donde estaba la cicatríz de la mordida de Christopher. Un grito ahogado salió de mi boca mientras llevaba una de mis manos a mi cicatríz. Rápido la quité por qur al instante que la toqué me dolió a más no poder.

Tenía una mezcla enorme de sentimientos. Estaba enojada, decepcionada, triste, adolorida...

No podía creer que Christopher me haiga hecho esto. Pensé que el en verdad me quería. Pensé que enzerio estabamos destinados a estas juntos, que eramos almas gemelas. Pero al parecer me equivoqué con eso.

Llena de furia golpee al árbol que estaba más cerca de mi dejando la marca de mi puño en el.