Toxic Relationship [Jongkey]

Kibum II

Venía riendo con su hermano de bromas absurdas sin gracia por la mitad del pasillo de la universidad, eso hasta que el mayor notó una cara conocida y preguntó:

-Oye, ¿Ese no es Jonghyun?-

Kibum arrugó el entrecejo cuando vio al contrario señalar al que se supone que es su novio.

Se supone, porque estaba besando a otro chico.

Apretó sus manos en dos puños. De repente su buen humor se había esfumado.

Ya lo había encontrado engañandolo dos veces en lo que iba del mes. Jonghyun era increíble.

Paciencia para no matarlo.

-¿Me permites?- y sin esperar respuesta, tomó la bebida de las manos de Onew, y camino sin mirar atrás, hacia donde se encontraba la pareja.

Onew rodó los ojos ante la ya conocida escena que iba a presenciar otra vez.

Probablemente debería ir y golpear a Jonghyun por no respetar a su hermano, o al menos detener a Kibum de hacer el ridículo una vez más.

Pero ya estaba cansado de que él no lo escuchara.

Kibum no quería entrar en razón, no quería abrir los ojos ante el tipo de vínculo co-dependiente ponzoñoso y dañino que se estaba volviendo su relación con Jonghyun.

Él no quería cortar por lo sano.

Y aunque le preocupaba la salud mental y física de su único hermano, Kibum era un adulto y no podía tomar decisiones por él.

Cerró los ojos angustiado cuando se empezó a escuchar los gritos que ya esperaba.

-Esto no terminará bien- susurró para sí mismo.

**

Los labios contra los suyos eran suaves, dulces y hasta cierto punto, adictivos.

Ren era un pequeño al que quería probar desde hace algún tiempo.

Y no estaba mal.

Definitivamente no estaba mal.

Al menos eso podía decir a partir de lo poco que probó. Porque en menos de un latido ya no fue capaz de sentir esos belfos contra los suyos y cuando abrió los ojos para buscar la razón se encontró con su lindo novio tomando al otro chico del pelo mientras le vaciaba algo viscoso a la cara.

Mierda.

-¡Bebe, no, sueltalo!-

Reaccionó rápidamente tomando a Kibum por la cintura, intentando apartarlo a la vez que este golpeaba a Ren en la cara mientras lo seguía jalando salvajemente del pelo.

El chico solo chillaba mientras se cubría la cara.

-¡Maldita básica! ¡¿Tan necesitado estas que intentas cogerte a un hombre ocupado?!-

Kibum se encontraba fuera de sí, maldiciendo y golpeando como podía a la aparente "mosca muerta" que casi se había comido a su novio, mientras una fuerza externa intentaba apartarlo.

Porque sí, Kibum sabía que Jonghyun podía no ser un santo pero ¡Diablos! todos en esa maldita universidad sabían que ellos estaban juntos desde hacía mucho tiempo.

¿Tan difícil era respetar una relación?

Ni siquiera se dio cuenta de que ahora se encontraban más personas rodeandolos intentando que soltara la maraña de pelos en sus manos, tampoco se dio cuenta del sonido de los flashes de las cámara. Se vio más enfurecido cuando finalmente lograron que se quitara de encima del otro.

-¡No, espera, aún no termino con él!-

Fue llevado a la fuerza lejos de allí, siendo cargado como saco de papas por los brazos que ya conocía muy bien.

Vio como Ren estaba hecho un desastre mientras lloraba, y no dejaba de gritar "¡Esa perra está loca! Miren como me dejó".

Eso solo lo encendió más, provocando que hiciera más esfuerzo por salirse del agarre en el que estaba y volver hacia donde ese imbécil para asegurarse de que no se siguiera haciendo la víctima.

Porque por más que el otro chico llorara, el más lastimado seguía siendo él.

**

Cuando finalmente se vio libre del agarre en algún aula vacía, no dudo dos segundos.

Arremetió contra Jonghyun, proporcionándole un puñetazo en la mejilla, haciendo que su labio se partiera.

-¡¿Por que me sigues haciendo esto?!- preguntó con el rostro completamente rojo empujando al otro una vez más, sus ojos ardiendo en furia -¡No lo entiendo! ¡De verdad no lo entiendo!-

Jonghyun se llevó una mano al labio partido completamente sorprendido, no quería decir que no se lo merecía porque sabía que si lo hacía, pero... Kibum nunca lo había golpeado a pesar de que había hecho cosas mucho peores en el pasado.

-Bebé... Me golpeaste- susurró aún sin podérselo creer, se sentía como una ama de casa a la que le levantan la mano por primera vez.

Kibum rechinó los dientes.

-Si, lo hize- soltó despectivamente y sin esperar respuesta tomó al mayor del cuello de su camiseta acercándolo a su rostro para hablarle en tono duro -Escuchame bien, Kim jodido Jonghyun, porque no lo volveré a repetir, procura que la próxima vez que estés con tus jueguitos que yo no te vuelva a encontrar, porque de lo contrario yo mismo me encargaré de que no vuelvas a tener deseos de estar con alguien nunca más- apretó más su camiseta y Jonghyun jadeó asustado -¿Entiendes?-

El mayor asintió rápido para luego sentirse liberado luego de un brusco empujón.

-Bien, me voy. Si te consideras lo suficientemente hombre, ve con la puta de Ren tan pronto salga de esta aula, si te parece-  inquirió con sarcasmo sabiendo que con su pasada advertencia Jonghyun no volvería a serle infiel, al menos por unas semanas.

Jonghyun se quedó anonadado mirando al menor a punto de salir de la habitación.

Cinco años de relación, y Kibum nunca le había hablado de esa forma, siempre fue celoso y siempre le reclamaba, pero... Era la primera vez que realmente le amenazaba.

Y no entendía porque diablos le encantó que lo hiciera.

Debía de haber algo mal con él.

-¿B-bummie?- Se acercó a Kibum  y tomó su mano justo antes de que este abriera la puerta. El menor lo miró serio esperando que hablara. -Si sabes que él no significa nada ¿Verdad?- susurró.

Kibum respiró hondo y cerró los ojos cuando sintió a la cabeza de Jonghyun reposar entre su hombro y cuello mientras lo envolvía en sus brazos, sin dudarlo mucho correspondió el abrazo.

A veces, comparaba a Jonghyun con un niño.

Los niños podrían jugar, curiosear y equivocarse millones de veces, pero al final... Siempre volvían arrepentidos a los brazos de su madre.

-Lo sé, sólo yo soy a quien amas yeobo, pero eso no te salva de dormir en el sofá esta noche-

Jonghyun siempre volvía a él.

Por eso no lo dejaría, porque sabía que por más juegos y aventuras que tuviera su pareja, este definitivamente solo lo amaba a él.

Y aunque quizás no fuera sano, saber eso por el momento era suficiente para Kibum.

Solo por el momento.