Queridos padres, los que en teoría me amáis pese a todo. Los que en teoría estaréis para todo. Os digo una cosa. Os necesito. Me da tanto coraje que no aceptéis mi relación con mi novio solo por el echo de que no es Español y por tener 16 años.
Me da tanto coraje que me insultéis por tener novio.
Me da tanta impotencia.
Una cosa más, os necesito porque sufro. Sufro día a día en silencio. Llorando en la almohada y en el baño. Llorando con los brazos sangrando dónde nadie me puede ver.
Llorando pero desahogándome.
Llorando, muriéndome por dentro.
Llorando, deseándome que esto acabe ya.
Llorando, haciendo daño a mi cuerpo.
Lo siento, siento no ser la hija perfecta que tanto deseabais, la que seria vuestra sumisa hasta el día que se casará, la que se calla todo, la que no sufre, la que es feliz. Siento ser un error mas en vuestra vida.