Capítulo 13

11.4K 591 161
                                    

_¿No me darás mi besito de buenas noches?

La débil luz iluminaba su rostro digno de un modelo de revista, creando sombras en la parte derecha de su cara. Viéndose adorable bajo las mantas y sonriendo con sus labios pegados.

_Creo que ya estás demasiado grande para eso.

¿Piensan que iba a hacerme la difícil? ¡Pues no! Me moría de ganas por besarlo, pero supongo que era masoquista porque me gustaba sentir que el deseo no podía ser saciado y entonces cuando lo era se disfrutaba mucho más de lo esperado.

_Entonces finge que somos niños_. Hizo un mohín de súplica.

_No, eso raro._ Fruncí el ceño al imaginarme a dos niños durmiendo en una misma cama con más intenciones que sólo dormir. Me corrió un horrible escalofrío por la espalda._Los niños no se besan.

Su sonrisa se ensanchó.

_¿Vas a besarme?

¡Sabe Dios porqué últimamente me sonrojaba tanto! Parecía la protagonista de un libro que había leído hacía unos años.
Mis hormonas estaban muy alborotadas, el maldito Andrés ya estaba por llegar. Sólo rogué estar en casa cuando eso pasara.

Abrió su cama y palmeó un pequeño espacio vacío en el colchón, invitandome a acostarme. Volteé los ojos con diversión y me acomodé a su lado, ambos muy apretados por el poco lugar que había en aquella cama diseñada para que una sola persona durmiera en ella.
Debo admitir que me agradaba la cercanía.

Acarició un lado de mi cara con sus dedos y no dejé de sonreír en ningún momento hasta que habló:

_¿Qué pasará con Ethan?_Su mano se escondió debajo de la almohada._ Dime que no volverás con él, por favor, porque de verdad duele, Kay. Es doloroso verte con otro y ser un cobarde para no saber decirte que te..._su fluidez al hablar se perdió cuando pareció darse cuenta de lo que estaba a punto de decir. Un debate se formó en su mente, lleno de dudas e inseguridades_... que te quiero.

_Ambos somos unos cobardes, Liam. Pero estoy aquí ¿no? Contigo_aclaré, deseando que no tuviera ninguna de esas dudas._ Siento que ahora tú seas el que tenga miedo.

Miedo a enamorarse.

Siempre pensé que si salíamos él iba a romperme el corazón. Tantas veces vi a chicas que él trató como princesas, que las sedujo más allá de su físico, que las atrapó con simplemente una mirada y una sonrisa.
Y luego vi a esas misma chicas llorando por los rincones, porque Liam Garden no podía sentir amor.

Pero sí. Él sí podía enamorarse, aunque le costaría reconocerlo. Compartíamos el mismo miedo a que un romance no fuera eterno. Temíamos lastimar, temíamos perder.

Liam había sentido amor por un padre que lo abandonó. Liam había sentido amor por una madre que no se quería a ella misma.
Liam había amado a su mejor amigo que lo había apuñalado, literalmente, por la espalda.

Creí que era más probable que él me lastimara a mí, pero ahora que sabía que sufrió en silencio viéndome con otro chico por meses, comiéndose sus celos para no comportarse como un imbécil, me di cuenta que yo era la más propensa a herirlo. Y eso me aterraba.

_Te quiero demasiado,_desvié la mirada hacia abajo_ tal vez más de lo que esas palabras puedan expresar. Sé que es temprano para decirlo pero estoy harta de obligarme a mi misma a sentir algo que no siento. Yo quiero estar contigo, como amigos, como novios_sonrió_, como sea. Pero contigo.

Se escuchó un fuerte golpe en la pared de durlo detrás de nosotros, miramos el muro como si pudiéramos ver a la persona detrás de él, interrumpiendo nuestra dramática y escénica conversación cursi.

Desventajas De Ser La Amiga Del Playboy [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora