Noche de golosinas

El día de muertos había llegado y la hora para pedir golosinas se aproximaba, Wei Ying estaba emocionado porque por primera vez acompañaría a su pequeño sobrino y a su hijo a pedir dulces, ambos niños ya tenían la edad suficiente para poder andar y pedir dulces con sus vocecitas tiernas y ganándose caramelos con sus tierno ojitos. Wei WuXian les había enseñado como poner los ojitos brillantes y caritas tiernas para que recolectaran muchos dulces de las amas de casa.

-Wuoff!-escuchó un ladrido tras de sí que lo hizo saltar por el miedo que sentía por esas pequeñas bestias y alejarse lo más pronto posible.

-¿Por qué corres?- preguntó un pequeño Jin Ling disfrazado de un hombre lobo, sus orejitas sobresalían de su cabello suelto y parecían tan reales, pues se movían de repente, sus manitas estaban cubiertas por unos guantes en forma de garritas peludas y sus zapatos también estaba cubiertos simulando también unas patitas caninas. Del pantalón de pijama amarillo sobresalía una cola de lobo pequeña que parecía real, y de sus labios sobresalían dos pequeños colmillos. Su carita estaba ligeramente pintada alrededor de los ojos para ensombrecerlos un poco para resaltarlos.

Wei Ying estaba teniendo un dilema en su interior, su pánico por los perros le hacían difícil ver lo tierno que se veía su amado sobrino, y es que con la bolsa de calabacita que sostenía en sus manos y los ojitos llorosos que le había enseñado lo hacían abrazarlo, pero con ese disfraz era renuente a hacerlo.

-Nada A-Ling, solo que me asustaste con ese disfraz tan feroz- dijo sonriendo titubeante, pero sin decirle la verdad a su sobrino. El niño abrió los ojos muy emocionado por saber que su disfraz era feroz como él había querido, y sonriendo corrió a buscar a su tío Jiang Cheng para agradecerle por escogerlo.

-Tío Cheng, tío Cheng, -exclamó el niño corriendo hacia un hombre joven que estaba disfrazado al igual que su sobrino. –El tío Xian dijo que era muy feroz- dijo riendo alegremente y abrazando su pierna- Tío Cheng, gracias.

Jiang Cheng sonrió tomando en brazos a su sobrino,-Te dije que ese disfraz funcionaría para asustar a WuXian.

-Si- rió para abrazar más fuerte a su tío.

Wei WuXian quien había visto todo solo pudo llorar internamente por lo acertado de la decisión de su hermano, incluso se sintió renuente a acercarse a Jiang Cheng cuando vio que iba disfrazado igual que Jin Ling.

Unos pasitos calmados se oyeron por el corredor. Un lindo vampirito bajaba las escaleras con cuidado de caerse sujetándose de los barandales pero con gracia, su rostro estaba pálido, sus ojos oscuros resaltaban el color azul y de su boquita sobresalían dos colmillitos un poco más grandes que los de Jin Ling con unas ligeras gotitas de sangre que escurrían de las equinas de sus labios. Estaba vestido con un traje negro, y camisa blanca elegante, de sus hombros colgaba una capa con cuello alto rojo. Sonreía ligeramente cuando vio a su padre a un lado de las escaleras esperándolo con una bolsa en forma de murciélago en sus manos.

Wei Ying no iba vestido al igual que su hijo, si no que iba disfrazado como un diablillo negro, tenía un par de cuernos que sobresalían de su larga cabellera, que iba sujeta en media coleta por un listón rojo, vestía un traje de cuerpo completo que se pegaba a su figura y de la parte trasera sobresalía una cola delgada que terminaba en forma de corazón. Su hijo se apresuró a ir tomar la mano de su padre y sonreírle cálidamente.

-Papá, ya estoy listo- dijo feliz.

Jin Ling apenas y oyó la voz de su primo, se removió en los brazos de su tío, haciendo que este lo bajara para inmediatamente correr a donde estaba A-Yuan, en cuanto lo vio se lanzó a su primo provocando que los dos cayeran al piso, son Jin Ling sobre SiZhui. Lo primero que vio SiZhui fue como RuLan llevaba unas orejitas que se movían cada tantos segundos y como su primo sonreía feliz.