Fernando estaba sentado en el suelo con una rodilla doblada donde apoya su codo en la rodilla y con su mano apoya su mentón mientras mira a la nada serio, sólo pensaba en como todo había acabado así, en ese momento donde todo se había ido a la mierda, o al menos eso parecía que había pasado, su mente estaba algo confundida y sus pensamientos estaban revueltos, 》¿Cómo iba a solucionar lo que había hecho?《... las palabras no se borrarán con un simple "perdón", las acciones que utilizó no serán olvidadas siquiera con el tiempo, ahora mismo sólo podía recordar el rostro del menor cuando le dijo esa frase que parecía haberlo destruido por dentro, su cara se había transformado completamente sus ojos parecían haber perdido todo el brillo, su sonrisa se había perdido en unos simples segundos, lo único que quería hacer era disculparse pero ya no podía siquiera respirar en el mismo lugar que él porque el contrario se alejaría sin dudarlo en ningún momento.
Ya empezaba a sentir el calor de los nervios recorrerlo por completo, con un simple movimiento acomodó su cabello hacia atrás pensando todo el tiempo en lo que había dicho su conciencia lo carcomía por dentro... solo pensaba en la cara de aquel pelirrojo que lo enamoraba con cada palabra que salía de su boca, lo que mas lo enamoraba era su sonrisa y su risa.
Pensar que ya no podría verlo nunca mas lo hacia sentirse vacío, como si su existencia fuera nula si no estuviera su amado.
Tomas llega donde Fernando y se sienta a un lado de él sin decir nada y sin mirarlo en ningún momento sólo estaba en silencio, hasta que Fernando rompe el hielo con sólo un largo suspiro - ¿Crees que hice mal verdad? Vamos, sólo insultame si quieres, ya no me importa en realidad -
Tomas sólo lo mira y acomodándose abraza sus piernas y mira al frente - Sólo quisiera saber ¿Por qué lo hiciste? -
Fernando se tapa la cara con ambas manos en señal de mucho arrepentimiento y de sus labios solo salen 6 palabras - No lo sé... - una palabra tan utilizada como las letras del abecedario, él realmente no sabía que había hecho mal pero tampoco quería mentir diciendo algo que no era en realidad.
Tomas lo mira y apoya su cabeza en sus brazos - ¿No lo sabes? ¿ Es enserio que no lo sabes? ¿O no quieres decirmelo? Pero como eres no me sorprende que no lo sepas - da una leve sonrisa y mira al frente aún con su cabeza sobre los brazos - estar aquí lamentándote no servirá de nada, no esperes que todo se arregle como si no hubiera pasado nada y tampoco esperes que él te diga algo, y tu solo empieces a decirle lo arrepentido que estás y lo mucho que lo amas - Dice sólo mirando adelante para unos instantes despues levantarse - yo no puedo decirte que hacer... - se va de ahí con las manos en los bolsillos solamente camina tranquilo.
El castaño pensaba en lo que Tomas le había dicho y sólo miro a un costado dando un leve suspiro pensando en que es lo que haría... su mente ya estaba hecha un desastre como para ponerse a pensar en las palabras que le dijo Tomas hace unos momentos, se levantó serio y respiró profundamente para que las lagrimas no salgan, aunque en sus ojos se veía a metros la tristeza que él sentía, sólo se va de ahí poniendo una cara de nada para que nadie notara lo que él sentía además no estaba de humor para responder preguntas aunque nadie pregunte no le gusta demostrar que estaba totalmente destruido por lo que había pasado, se había pasado todo el recreo en el patio bajo el sol, era todo tan tranquilo y tan silencioso, bueno al menos antes de que apareciera Tomas a hablarle, la presencia de Tomas no le molestaba pero ese momento no era lo que el necesitaba, lo que Tomas le había dicho no sabía si entenderlo como un regaño o como un consejo de un amigo. Eso no le importaba ahora, solo quería irse o tal vez desaparecer del planeta...
Luego de un día muy agotador y aburrido sólo pensaba en Adrián el cual había pasado lo que restaba del día con Maxi, eso lo había puesto muy celoso pero sabía que no podía decir nada y tampoco hacer nada ya que Adrián no era de su propiedad, además el pelirrojo estaba bastante enojado por lo que había hecho, aunque si él le dijera está muy seguro que el menor no le haría caso aunque se pusiera de rodillas y le rogara.
Se puso los auriculares con su música favorita a Máximo volumen, el en serio no quería escuchar al resto del mundo... lo único que él necesitaba era escuchar la risa de él, escuchar su voz y tocar su cuerpo, tenerlo muy cerca y poder besar esos dulces labios que tanto le gustaban, cada vez que lo besaba sentía que Adrián tenia un sabor muy dulce, un sabor a frutilla irresistible.
Pensar eso lo hacía sonrojarse y sentía un escalofrío que le recorría toda la espalda al recordar todo lo que hacia con él.
- Perspectiva de Adrián -
Ese día había pasado normal, como cualquier otro a excepción de que Fernando le había dicho algo, se sintió algo raro y se había sorprendido por eso, pero no le tomó mucha importancia cuando reaccionó y está por decir algo se da cuenta que Fernando se había ido corriendo, así que se queda solo con Maxi , mira hacia la puerta y ve que Tomas se va hacia donde fue Fernando, eso lo hizo sentirse algo celoso así que solo empieza a hablar con Maxi como si nada.
Estuvo todo el día muy pegado a Maxi ya que eran buenos amigos y a veces buenos amantes, pero eso no era muy importante ya que les agradaba la compañía del otro.
Cuando sale de la escuela ve a Fernando irse sólo así que decide no molestar e ir por otro lado mientras pensaba en que pudo haber hecho para molestarle de esa forma, tal vez se había enojado por que no le prestó atención, o tal vez porque no lo escuchó, él sabe que nada que él haga lograría molestarle pero Fernando siempre fue algo impulsivo así que sólo no le tomó mucha importancia.
