Capitulo 87

2.1K 86 1
                                    

Al llegar al hospital, bajaron rápidamente a mi abuela y la llevaron a lada de emergencia. Comencé a llorar en cuando vi como la llevaban, tan débil, tan vulnerable , tan lejos. Mi madre me abrazó y trató de calmarme, cosa que logró luego de un largo tiempo.

Pasaban las horas, no nos decían nada. Veíamos salir y entrar doctores, pero ninguno se detenía a darnos explicaciones. Mi padre caminaba de lado a lado, nervioso. Él quiso que nosotras nos valláramos a casa, pero no quisimos. Solo le insistió a mi mamá para que se quede con Mora, al menos un rato hasta que llegue alguno de nosotros. 

Más tarde, mi papá se sentó a mi lado y tapó su rostro por el sufrimiento. Yo lo observaba sin entender, tenía mi mente en blanco, aun quería asumir lo que pasaba

Tp: ¿Por qué no nos dicen nada? –dijo molesto-

Tu: tranquilo pa –decías colocando una mano sobre su hombro- ya nos dirán su estado –decías tranquilizándolo-

Tp: ya pasaron varias horas que estamos aquí, ya es de noche ¿quieren que esperemos hasta mañana?

Tu: papá.. cálmate, gritando no lograrás nada, solo escándalo

Tp: -suspiró ruidosamente- tienes razón.. perdón

Tu: está bien, te entiendo –miras un punto fijo en la pared- ¿crees que pueda.. salir?

Tp: -te mira- tu abuela es una mujer fuerte, más que 

cualquier mujer que conozca, ha pasado por muchas 

cosas.. pero.. 

Tu: ¿pero?

Tp: yo creo que ésta será su última batalla..

Tu: -suspiras- tengamos fe.. ella siempre nos dijo eso

Tp: si.. pero en estos casos.. se me es imposible

Ambos nos quedamos en silencio, solo se escuchaban nuestros pensamientos. Luego de unos minutos, salió un doctor. Dijo el apellido de mi abuela y ambos nos levantamos al mismo tiempo

Tp: ¿Cómo está?

Dr: -suspiró- mire.. les seré franco, está en un estado delicado, no creo que pase más de dos o tres noches, tuvo una fuerte recaída, tuvieron suerte de traerla antes, si no ya no estaría aquí.. 

Tu: ¿no hay ningún forma de ayudarla a que vida más días?

Dr: me temo que no, lo siento, con permiso 

El doctor se retiró y yo comencé a llorar, de nuevo. Mi padre me abrazó y también se quebró. Todo esto era muy difícil para ambos, de solo pensar que no la veré mas luego de estos días, me destroza

Tp: -limpia sus lagrimas- iré a casa un momento ¿quieres ir? Yo luego volveré

Tu: -niegas con la cabeza- quédate en casa, yo me quedo aquí..

Tp: hija..

Tu: -interrumpes- enserio, te ves cansado, yo haré guardia, cualquier cosa te llamo

Tp: -te mira- está bien, mañana temprano estaré aquí.. –besa tu frente- cuídate.. te amo

Tu: te amo mas, estaré bien, no te preocupes

Mi padre me dio una última mirada y se marchó. Yo me quedé en el pasillo frio esperando a que pasara algo, una nueva noticia, algo sobre mi abuela. Quise intentar estar despierta toda la noche, pero el cansancio me ganó. A cada rato me despertaba de golpe y volvía a dormirme. Sentía a los doctores entrar y salir a todo momento, algunos pasaban con varios papeles, y otros con sueros, también con sus elementos de trabajo. No podía imaginarme lo que le estarían asiendo, o lo que le estaría pasando a mi abuela allí dentro.

A la mañana siguiente sentí unos pasos acercándose a mí. Abrí los ojos y vi un par de zapatillas blancas en frente mío. Levanté la mirada y vi que era mi padre, por un momento había pensado que era Niall, pero no, solo era mi padre

Tp: ya llegué –susurró- ve a casa

Tu: no.. mm.. quiero quedarme –dijiste algo dormida-

Tp: enserio (tn)___, ve a descansar –besó tu frente-

Me levanté y fui rumbo a mi casa. Sentía todo mi cuerpo débil, mis ojos pesaban y mi estomago gruñía. Cuando llegue a mi casa, solo pensé en acostarme a dormir. Solo saludé a mi mamá y a mi hermana y me dirigí a mi cuarto.

Más tarde, luego de haber dormido unas cuantas horas, me levanté y me duché. Me coloqué algo cómodo y bajé a comer algo para volver al hospital.

Tm: (tn)___.. no vayas, quédate, yo iré

Tu: no, iré yo, dije que estaría para mi abuela en todo momento, quizás ella no me vea porque está detrás de una puerta, pero se que siente que lo estoy

Tm: está bien

Tomé mis llaves y volví al hospital. Ya era un poco tarde, así que hice nuevamente un cambio con mi papá. Costó un poco convencerlo de nuevo, pero lo logré. 

A la madrugada, cuando caía nuevamente dormida, comencé a sentir frío pero en eso sentí una manta 

cubrirme y a una persona a mi lado. Vi unos pies, llevaba unas zapatillas blancas de la marca Nike. Pensé en mi padre de nuevo, pero no, esta vez no lo imaginé, estaba Niall a mi lado.

~Stay With Me~  Niall y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora