Lauren & Gad

IV

Gad

- ¿Vas a tener algo con Lauren?- me preguntó Roy mientras nos sentábamos en la arena

- No, no lo creo.-

- Ella es difícil ¿no?- dijo Peter

- Lo es, pero no para mi. No la quiero, tal vez... Todos la quieran, pero yo no.-

- ¿Entonces por qué si te invitó viniste? Según recuerdo, hoy tu hermana y mi hermano tienen entrenamiento de fútbol.- dijo Roy

- Si, pero...-

- Y tu siempre la vas a buscar.- dijo de nuevo Roy

- No tenía nada que hacer, se iba a ir con unas amigas.- dije tratando de excusarme

- Esta bien.- dijo Peter- Iréa dentro a ver la televisión.-

Roy y yo nos quedamos solos. Lo conocía desde hace mucho, era uno de mis mejores amigos, pero nos distanciamos, esperaba que ahora nos pudiéramos llevar bien.

Lauren

¿Me gustaba Gad? Que estupidez, obviamente no. Pero tenía algo que me hacia sentirme incómoda, algo que me llamaba la atención.

Todos los chicos se fueron a dormir y yo me quedé en la playa, pensando en que haría para hacer todo lo que quería. Comencé a hacer la lista en una libreta. Llego Gad y me la quitó de las manos.

- ¿Debes hacer todas estas cosas?- preguntó

- Eso quiero.-

En ese momento agradecí a Dios que no había puesto ningún nombre.

- ¿Nunca haz tenido un beso real?-

- Solo he besado de piquito.-

- Bueno, estas mal.- rió

- No te burles.-

- Solo me pregunto como Ryan nunca te beso bien.-

- El y yo nunca fuimos tan buenos novios.-

- Eso lo explica todo. ¿Y que es esto de: tener relaciones?-

- ¿Qué?- grite y me puse roja

- ¿No haz...?-

- No, ¿algún problema con ello?-

- Si, eres una de las más deseadas de la escuela.-

- Pero nadie llama mi atención.-

- Pero si hay muchos guapos. Tu eres la número dos y podrías salir con el número dos.-

- El número dos eres tu.- dije molesta

- Lo era hasta hace 1 mes, ahora soy el número 1. Roy es el número 2, por cierto y tu también eres la número 1, ahora Bonnie es la número 2.-

- ¿Insinúas que debo salir contigo? - le pregunte

- Deberías de hacer todo lo de esta lista lo más pronto posible.- cambió de tema

- ¿Podrías ayudarme?- pregunté con miedo

- ¿A cuál de todas estas?-

- A todas.-

- ¿Dejarías que te besara?-

- Si.- dije nerviosa-

- Esto es muy fácil para una chica difícil como tu.-

- Entonces... ¿No lo harás?-

- Hazlo más difícil para que pueda besarte.-

- Esta bien.- me levanté de la arena y el me siguió