Hermandad

Capítulo 1

– ... Fui yo – reveló, sosteniendo su mirada, impasible – Fui yo – repitió con el Sharingan arremolinandose como cuchillas, como la forma más avanzada, desconocida para Sasuke, como el Mangekyou Sharingan

Entonces los colores se revirtieron, las figuras se deformaron hasta quedar de nuevo en una imitación demasiado realista del mundo, mostrando lo que el creador del genjutsu deseaba

En este caso fueron recuerdos desbordantes de dolor y pesar, pero una fuerza de voluntad ardiente, el deber, el amor

– ¿Qué es esto? – fue atacado imprevistamente por un genjutsu el cuál aún no sabía deshacer, no había diferencia alguna con la realidad, sólo  el conocimiento de Sasuke del Sharingan girando y cómo todo era imposible ocurrir a no ser de qué se tratase de una ilusión

– Itachi – dijo la voz de su padre, con una especie de determinación, resentimiento y amargura que no había notado antes – Eres el puente que conecta el clan y la aldea, tienes el deber como informante doble como Anbu del Hokage, escolta de confianza y espía del clan

– Sí, padre – aceptó tenso como las cuerdas de un violín, mirando seriamente hacia adelante

El escenario cambió para mostrar la oficina del Hokage junto con tres ancianos los cuales asumió eran el consejo del que le habló Itachi

– Si un golpe de estado sucediera ahora, las demás aldeas nos verían debilitados y aprovecharían para atacar – dijo Hiruzen con pesar

– Tendremos que movernos antes que ellos, matarlos y no dejar ni uno solo, tanto mujeres como niños – añadió el de cabellos oscuro

– ¡Danzō! _ regañó el Hokage – No digas eso frente a Itachi-kun

Entonces frente a un santuario, el mismo hombre, Danzō, estaba mirando a Itachi hacia abajo

– Como van las cosas todos serán asesinados – dijo, y sólo era un hecho – Pero si tú lo haces, entonces dejaré vivir a tu hermano menor – ofreció con una sonrisa, sabía que no se negaría – Elige, Itachi. Puedes ayudar a los Uchiha con el golpe de estado y morir con ellos o asesinarlos y entonces Sasuke se salvará

La realidad se deformó un poco más, mostrando a Shisui frente a un lago con un ojo cerrado y sangrante

– ¡Shisui! – exclamó Itachi horrorizado

– Danzō tomó mi ojo, supongo que sabía que no podría matarlos... – dijo con amargura – Lo siento por dejarlo todo sobre ti, Itachi – se disculpó sonriendo, no porque estaba feliz, si no porque sería la última vez que se verían – Danzō tomó mi ojo izquierdo, entonces te dejaré mi ojo derecho – se lo entregó antes de saltar hacia atrás, una oscura figura cayendo rápidamente y chocando con fuerza en la superficie

Cambiando otra vez de escena, esta fue una que Sasuke reconoció

– Si creen que asesiné a Shisui sólo diganlo – dijo su hermano con voz oscura

Sasuke recordó haber estado ahí, haber visto a su hermano luchar contra los miembros del clan y estar aterrorizado por lo que le sucedería si continuaba

– ¡por favor, detente! – Sasuke se vió a sí mismo gritar desde la puerta. Itachi dejó caer el Kunai y se arrodilló, disculpándose

Pero ahora Sasuke entendía, cuánto debió doler ser acusado así, de asesinar a su mejor amigo, cuando el culpable de todo lo que le sucedía al clan se ocultaba

Cómo el clan sospechaba de ti cuando hacía todo lo posible por salvarlos

Una vez más, la escena cambió