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Cuando Ruggero se dio cuenta del engaño de sus amigos era muy tarde, y ahora estaba esperando a que Karol saliera de clases para luego ir juntos a ver una película.

Por fuera estaba sonriendo a las personas que le saludaban, pero por dentro era un mar de nervios.

Últimamente estar con las mejillas sonrojadas era tan normal para él como desayunar en la mañana.

"Hola Ruggero", saludó Karol con una linda sonrisa. Era demasiado para su corazón.

"¿Vamos?", logró verse casual al decirlo. Ella asintió.

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"¿Cual veremos?", preguntó cuando estuvieron frente a la cartelera.

" ¿Cual te gustaría? "Señaló una de terror. Ruggero sudo frío, asintiendo.

Durante toda la película estuvo temblando, de paso botando las palomitas y aferrandose a la mano de la chica, quien le calmaba diciéndole que ahí estaba junto a él, y no dejaría que nada le pasara.

Al salir, Ruggero lucía pálido, lo que hizo reir a Karol.

"Oye, de haber sabido que no te gustaban, hubiéramos visto otra. "El negó. Aún tomados de la mano.

Inspiró hondo. Era su oportunidad. Incluso el ambiente parecía animarlo: las lucecitas titileantes que adornaban el sitio hacían brillar los hermosos ojos  verdes de ella.

"Hay algo que quería decirte desde hace tiempo" su manzana de Adán moviéndose al tragar nervioso, mirándola fija y cariñosamente.

" ¿Hm? " Karol se acercó un poquito.

"Yo..." Miró sus labios. "Tú..."

"¿Yo?"

Desviando brevemente la mirada notó a sus amigos apilados tras una mampara, espiandolos.
Consiguiendo leer los labios de Agus y Jorge un "Tú puedes", y un "no seas gallina" de Pasquale. Volvió su mirada marrón hacia ella.

"Me gustas mucho." Y de nuevo, el calorcito, ya familiar, se agolpo en sus mejillas.

"Creí que nunca lo dirías, Ruggero". Sonrío ella, apretando levemente sus manos, poniéndose de puntitas y depositando un beso en su mejilla. "Tú también me gustas mucho."

Y así, Ruggero se animó a acercarse y besarla, apenas un roce.

"Perdón por tardarme tanto".

"Esta bien, lo importante es que lo dijiste."

Otro besito, y luego otro y otro par más.

"Prometo compensar todo el tiempo perdido." Y uno más en la frente.

Al fondo se escuchaban gritos de emoción y vítores de sus amigos como "¡Si se pudo!", "¡Me pido ser el padrino oficial de la boda!", seguidos de un "¡Si no se callan tendrán que salir del establecimiento!" Por parte de uno de seguridad.

Ignorando el palpitar de su corazón y como sus amigos salían corriendo y escapando, abrazó a Karol, quien gustosa correspondió el gesto.

Podía sentir sus mejillas calientes, sin duda rojas, pero ahora había conseguido confesarse y era correspondido.

Estaban felices, y eso es lo que más importaba.


FIN.







Espero les haya gustado la historia. ☺Bay✌❤

Shy |Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora