Capítulo 1

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Ya ha pasado más de un mes desde que Seulgi prometió volver, el día de hoy se cumple exactamente dos meses de su partida y comienzo a creer que ella... no regresará.
Me puse mis pantuflas, salí de mi habitación y baje las escaleras, había demasiado silencio, llegué a la sala y ahí se encontraba mi madre, a quien saludo en un tono no muy animado

—Hyunnie, hija, buenos días—habla mi madre al verme bajar por las escaleras

—Hola mamá, buenos días, ¿que haces? —pregunto curiosa

—Hago los preparativos de la cena de esta noche, ¿quieres ayudarme?—mi madre se veía realmente ocupada, no podía negarle mi ayuda

—Claro que si mamá, Dime ¿en que te ayudo?—le pregunto interesada

—Me gustaría que fueras al supermercado a comprar unas cosas que me hacen falta, ¿Puedes ir? — preguntó mi madre una vez más

—Por supuesto mamá, iré a cambiarme, ya vuelvo—salí rápidamente de la sala subiendo nuevamente los escalones.

Entré a mi habitación y me dirigí al closet, busqué entre mi ropa una que estuviera bastante cómoda y al mover las blusas y camisas que tenía colgadas me encontré nuevamente con la chaqueta de Seulgi, al verla me doy un largo suspiro, adentro mi mano en uno de los bolsillos de la chaqueta y tomó la carta que Seulgi había escrito, la leo una última vez y al terminar de leerla, comienzo a arrugarla y arrojarla al cesto de basura, renuevo mi objetivo principal y tomo unos jeans negros y una playera de manga larga blanca con rayas negras y unos tenis blancos. Con mi teléfono en la mano comienzo a bajar una segunda vez las escaleras mientras le texteaba a mi vieja amiga Wendy, quien se encontraba en Canadá desde hace ya unos años.

Mi madre me extiende una larga lista de todo lo que debía comprar, me dió dinero suficiente y salí de casa.
Afuera me encontré con las pequeñas Joy y Yeri, estaban jugando y al verme corrieron hacia mi

—Hyunnie, ¿a donde vas?—me preguntó la mayor de las dos chicas

—Iré al supermercado a comprar unas cosas —les respondo amablemente

—¿Puedes llevarnos? —la menor, Yeri, pregunta con un gesto inocente en su rostro

Chequé la hora en el reloj que tenía en la muñeca, era temprano y las cosas que mamá necesitaba no eran muy importantes, me lo pensé un poco pero accedí

—Esta bien, Sólo si su mamá les da permiso —las tres caminamos hasta su casa para pedirle permiso a su madre quien gustosa aceptó.

—Cuida bien de ellas Hyun—Alcancé a escuchar a la madre de las menores, la señora Tiffany.

Tomé a ambas niñas de las manos y salimos de su casa tomando camino al supermercado, a apenas escasos pasos escuché una voz familiar detrás de mi que logró estremecerme...

—No creo que sea buena idea que vayas tu sola a la ciudad con dos niñas bajo tu Cargo— Me dijo, dí media vuelta encontrándome con la que podría ser la mejor sorpresa del día

—Seulgi... —apenas y pude articular su nombre cuando por mi rostro ya corrían un par de lágrimas

—¿Me extrañaste? —Fue lo único que dijo antes de que yo soltara a las niñas y corriera a sus brazos

—No te imaginas cuanto... —le dije dándole pequeños y suaves golpes en su pecho a manera de reproche

—Ya estoy aquí, te prometí volver y aquí me tienes linda—hablaba mientras pasaba su mano por mi espalda

—Hyunnie... ¿Quien es ella?—Preguntó Yeri observando a Seulgi de pies a cabeza

—Parece... Uno de esos personajes que sale en las películas... Un vampiro —Dice Joy divertida

—Bueno, luzco así por que yo so... —no dejé que terminara de completar su frase pues las niñas no debían saber que ella en realidad es vampiro

—Ella es Seulgi, una... Amiga... Luce así porque acaba de llegar de su viaje —respondo tan rápido a lo que Seulgi me voltea a ver con confusión

—Amiga... Sí, eso soy de Joohyun—reitera Seulgi

—¿Nos acompañas al supermercado Seulgi?—pregunta Yeri con gran entusiasmo

—Por supuesto, solo si Joohyun acepta —tanto Seulgi como las niñas voltean a verme

—Claro que sí tonta, vamos —Le respondo dándole la mejor de mis sonrisas.

Seulgi toma a Yeri entre sus brazos para cargarla puesto que está última le había pedido que la llevara cargada mientras que yo sostenía a Joy de la mano, parecíamos una familia lo que me pareció tierno, las personas quienes nos veían nos regalaban miradas de disgusto mientras que otras observaban enternecidas.

MIDNIGHT LOVE || SEULRENE G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora