Lo que es para ocurrir acontece

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Me quité los zapatos, puse los pies sobre el pasto húmedo, el horizonte a lo lejos me decía que el anochecer estaba cerca pero nada me preocupaba, capturaba el paisaje con una cámara de alta definición que tengo en mi mente y que por costumbre suelo llamar "memoria", tenía dos abrigos sobre mis hombros y aún así podía sentir como el frío lo limpiaba todo, la brisa me renovaba la piel aunque por fuera se siguieran viendo varias cicatrices, la calidad del aire era otra cosa, se respiraba tranquilidad, esperanza, cosas que simplemente no puedo comprar en la ciudad, por muy estrato seis que sea la tienda. Llevaba la peor ropa pero no me pesaba, había abandonado las expectativas, lejos de la gente, de sus miradas y comentarios vacíos se mueren todas las cargas, mueren los "debo" y nacen los "quiero", simplemente podemos escapar una vez al mes y empezar de nuevo, o fingir que somos lo que queremos ser. 

 En este momento me digo que soy hermosa, que tengo una casa grande en medio de un pueblito frío y los vecinos se encuentran a más de 2 kilómetros, que me preparé un café cargado y espero con un cigarrillo en la mano que los míos regresen a casa, estoy parada en la azotea donde tengo un par de hamacas, un jardín orgánico y muchas flores , una vista que vale más que toda la propiedad y un abrigo tejido hecho a la medida, una de las mangas se desliza por mi hombro derecho, le doy una calada más a mi cigarrillo pensando en qué haremos para cenar, que historias traerán mis hijos y cuántas veces más podré besar a mi esposo antes de caer dormida. No he salido en todo el día de la casa, pero me hace feliz, quizás el día de mañana recorra todo el pueblo en caballo, o tenga una cena romántica con mi amor en un restaurante típico, quizás termine el libro que me nomine al nobel de literatura o simplemente cree una historia de dos amantes jóvenes que me deje satisfecha, quizás llame a mis padres y los invite a pasarse el fin de semana acá o decida que no quiero hacer otra cosa que ver una película en la Tv. Me concentro en mis pensamientos y olvido que pronto llegarán todos a casa, que posiblemente ya estén subiendo las escaleras y no me vean en la sala, tendré que llamarlos para que se reúnan en la cocina, al fin y al cabo mis niños ya no son tan niños y a esta edad hay que recordarles que lo más importante siempre será la unidad.

 "El café se enfrió. Siempre te pasa" dice una voz que viene apareciendo detrás de mí, volteo entusiasmada, "estaba esperando que tú llegaras para beberlo juntos, siempre tardas demasiado." Sonríe, y sé que hemos creado un pacto, un hábito dulce e inocente en el que cada noche cuando él llegue yo estaré esperándolo en mi escondite, y habrán dos tazas de café en la mesa, un abrazo cuando lo necesite o un beso si la pasión reina ese día, me contará una historia, quizás me haga una promesa o simplemente nos compartamos un miedo que ha nacido, pero de la mano bajaremos juntos a enfrentar la realidad.

Nuevamente estoy en el pasto, lo que necesitaba era visualizar, el estar solos nos hace abrirnos a lo que llevamos dentro, porque contradictoriamente siempre lo olvidamos y estamos expuestos a lo que la carrera diaria nos vende, a consumir, a creer en cosas que no son nuestras, a envidiar la vida de otros, a perdernos la fe, a pensar que hacemos lo correcto porque vamos en línea recta siguiendo los pasos de otros que posiblemente sean más infelices pero que fingen que están llenos, porque ser débil y sincero con lo que sientes no se ve bien ante la sociedad, porque tener sentimientos no te ayudará a sobrevivir, y porque al cumplir los 18 nos empujaron al abismo con la triste idea de que de amor no vive el hombre.

Cúanto sentido cobra la vida cuando la visualizamos con amor. Doy una última mirada al horizonte, se ven en él los últimos rayos de sol, sólo unos minutos aquí y ya tengo claro que es lo que verdaderamente quiero para mi vida, que me haría completamente feliz, y algunas cosas ya las sabía, pero parecían tan lejanas... imposibles, cursis, sin sentido, ahora sé que hay sueños que causan risa para quién no los lleva dentro o para quiénes nunca han tenido la oportunidad de que otros los hagan parte de ellos; volveré a casa para saber como estás, para extenderte una invitación de que todo lo que construí hoy no sea solo una visualización. 

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⏰ Última actualización: Nov 12, 2021 ⏰

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