Alexandra, una vampira en una manada.
Se resignó a su vida permaneciendo alejada y callada.
Hasta que cosas cambian inexplicablemente.
Su hermana asesinada, su hermano vuelve, a quien conoce desde pequeña se transforma.
Todo cambia, pero su vida ti...
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Básicamente voy corriendo luego del final de clases para evitar ser vista por Scott o Stiles en la entrada.
—Alex— llama Scott.
Claro que no me funcionan bien los planes. Me detengo y volteo hacia él.
—Tenemos que hablar—
—¿En serio? — pregunto —¿Sobre qué? —
—No intentes fingir— reclama —Eres más tolerable que Derek—
Miro a Allison salir de la escuela, vuelvo a Scott al no oírlo más, él está mirándola detenidamente, parece que va a salir corriendo en cualquier momento.
—Dime algo si hubiéramos tenido una cita y en medio de todo me aparto para después dejarte sola ¿estarías muy molesta? —
—Es probable, sí— asiento —Scott, solo ve tras ella, yo espero—
Él tira sus cosas de Lacrosse al suelo frente a mí y camina hacia ella, solo lo sigo con la mirada y escucho atenta toda la ridícula excusa de Scott por abandonarla en la fiesta anoche, Allison sonríe al final de su conversación.
—Es papá— informa ella —Debo irme—
La expresión de Scott cambia, parece tensarse, llevo la mirada a Allison y al auto rojo que la espera, es el cazador de anoche. Dato que debo mencionarle a Scott, algo como "la chica que te gusta es de una familia que asesina a las criaturas sobrenaturales, como tú, pero no te preocupes".
El auto se marcha mientras Scott queda congelado allí, tomo su equipo de Lacrosse para dirigirme a él.
—Estás pálido— lo golpeo con sus cosas —Scott no te congeles—
—¿Él era? El cazador de anoche era él— asiento —Oh Dios—
—Oye escucha, debes mantener tu margen bajo, eres muy obvio— chasqueo los dedos frente a su rostro —Vamos, debes ir a tu práctica— lo jalo.
Dejo a un Scott en shock frente a la puerta de los vestidores y camino al campus donde por ahora no hay nadie, así que me siento en la banca de los espectadores. Los chicos llegan unos minutos después, son muy claras las miradas de incomprensión, lo admito si es raro que últimamente venga a ver el lacrosse o que hablé con los demás.
Me dirijo hacia delante donde se encuentra Stiles y palmeo leve su espalda.
—Es extraño verte tanto últimamente— suelta él —Y que me hables me aterra—
—Lo sé ¿Cómo está Scott? — pregunto.
—En pánico total— responde y voltea a mirarme de inmediato —¿Sabías de ellos? ¿De los cazadores? — susurra al final.
—Sí, pero se habían marchado de Beacon— respondo —De hecho, el apellido Argent no es muy querido por los seres sobrenaturales—
El entrenador suena su silbato y Stiles corre dentro del campo, así que dirijo mi mirada hacia la práctica, entrenamientos uno a uno.
