Αγρότης

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El de hebras castañas tomó la pequeña flor que había caído cerca de su humilde morada casi a las afueras de Atenas, la gran ciudad de la antigua Grecia. En este la filosofía, las artes, la cultura y el ingenio crecía día a día.

—¿Por qué una flor tan hermosa sería despojada de sus tierras? — murmuró el de bellos rasgos con la confusión plena en su rostro. Miro el atardecer y suspiro. — Mañana tengo que ir a Atenas por el día del los doce dioses. Podría llevársela a Apolo...

Sonrió débilmente e ingreso a su pequeña casa en las afueras de la gran capital que le hacía honor a la diosa hija de Zeus, Atenea. Su familia era de origen humilde y se había criado en la casa que seguía habitando, era un joven bello a pesar de no tener sangre noble corriendo por sus venas.

—Espero que no haya ninguna guerra más o el que se vera perjudicado seré yo, lastimosamente. Sempre los campesinos son los afectados tras esas atroces masacres. — revolvió su cabello y tomó la flor para dejarla a la luz de la luna cerca de su cama. Alzó sus comisuras ligeramente y se recostó en la cama algo dura pero que al fin y al cabo cumplía su función.

Soplo la vela que se encontraba al lado de su cama para despues cerrar sus ojos e intentar hundirse en un sueño tranquilizador que lo ayudaría a olvidarse de todas las amenazas y problemas que lo rodeaban en su cotidiana vida.

El día comenzaba como otro más para la clase más trabajadora y productiva de Grecia

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El día comenzaba como otro más para la clase más trabajadora y productiva de Grecia. Gente que manchaba su cuerpo en tierra y sudor para mantener así una economía estable en su imperio.

—¡Tae! — somnoliento el chico antes mencionado por la flor que había recogido, miro por el marco de su puerta hacia el exterior. Solo hace unos pocos minutos había despertado de un extraño sueño que al menos (agradecía el) no era una pesadilla sobre terribles acontecimientos que le ocurrían a su cosecha o a sus más cercanos.

Siempre tomaba aire antes de comer algo y empezar a trabajar.

—Yoongi. — elevó sus comisuras y sonrió ante el chico que parecía cansado. — ¿Por qué corrias?

—¿Hablas enserio Tae? — el más bajito y de ojos gatunos junto con unas hebras negras frunció un poco el ceño. — Hoy es día de fiesta, no tenemos que trabajar.

Y en la mente de Taehyung todo encajo perfectamente y soltó aire aliviado.

—Casi lo olvido. — se rasco la cabeza y soltó una pequeña risa. — ¿Vendrán tus primos como todos los años o preparo la carreta y los caballos?

—Tranquilo ayer llegó un mensaje y pasará por nosotros, no les causa ninguna molestia. — el más bajo sonrió. — ¿Le llevaras algo a los dioses?

—Ayer encontré una flor bellísima se la pondré a Apolo para evitar una guerra. — Tae miro hacia el cielo que estaba despejado, algo de aire corría y era tibio. Era un día agradable. — ¿y tú?

Deadly Desire ʚ♡ɞ | [Terminada] | ʰᵒᵖᵉᵛ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora