El despertar de un nuevo mal (Diakko)

Capítulo 5: El Sello

Capítulo 5: El Sello

-Te dije que no empujaras la puerta tan fuerte

-Lo siento Sucy es que no pude medir mi fuerza- fue la torpe repuesta de Amada al reproche de la otra al tiempo que ingresaba a la habitación seguida por los demás miembros del equipo verde, rojo y azul.

- ¿Akko estás despierta? Lamentamos el fuerte sonido- Lotte fue la siguiente en hablar dirigiendo su mirada en desaprobación hacia Amanda quien por su parte desvió la suya propia- Solo queríamos saber si te encontrabas bien.... - las últimas palabras salieron en un silencioso susurro al ver la pose de las chicas frente a sus ojos.

En la cama se encontraba Akko quien parecía estar muy interesada en algún punto fijo de un lado de la pared y junto a ella a un lado de la cama se encontraba Diana con la cabeza baja quien parecía estar interesada en algún nuevo punto cerca de sus zapatos... ambas desviando la mirada la una de la otra con sus rostros completamente rojos... con un silencio tan amplio que la tensión era palpable en el aire.

-Hey... ¿Qué pasa aquí? - La primera en hablar fue Amanda- Chicas no me digan que ustede- Sus palabras fueron cortadas por un estruendo proveniente de la silla de Diana.

Si me disculpan me retiro en busca de la enfermera- observo de forma rápida a la castaña - Es necesario que tenga conocimiento de que Akko recuperó su conciencia- Diana dejo la habitación evitando en el proceso que Amanda terminará de decir sus palabras.

Todas se quedaron estáticas sin comprender la situación por lo cual dirigieron la mirada rápidamente a la única chica capaz de darles una clara respuesta a lo sucedido, quien sintió un escalofrió recorrer su espalda al sentir como la observaban.

-Dinos Akko ¿Qué hacías con Diana en la habitación antes de que llegáramos? - Akko pego un respingo al sentir el brazo de Amada rodear su nuca con una sonrisa cómplice reflejada en su rostro que poco a poco se fue convirtiendo en una perversa, luego de Amanda se unieron Sucy, Bárbara y Hannah quienes invadieron de pregunta tras pregunta a la pobre chica... por su parte Lotte trataba de detener a las chicas indicando que Akko aún se encontraba delicada mientras Constanze arreglaba su robot y Jazminka comía sus frituras, al cabo de unos minutos Diana regreso con la enfermera y la profesora Chariot encontrado a una Akko casi sin vida en medio de todas las chicas, Diana y Chariot casi parecían vislumbrar como del cuerpo de Akko parecía salir un espíritu abandonando la tierra.

- ¿Qué paso aquí? - fue la rápida pregunta de la enfermera.

- Lo siento intente detener las, pero no pude - fue la contestación resignada de Lotte

- Sólo queríamos algunas respuestas a ciertas preguntas- fueron las palabras de Amanda dirigiendo su mirada a Diana quien sintió su rostro enrojecer al entender la indirecta.

- Bueno chicas se acabó la visita, Akko no está en condiciones de responder a sus preguntas y es momento de que la enfermera la examine, por favor regresen todas a sus habitaciones incluida tu Diana es tiempo de que descanses, todas asintieron acatando las ordenes de la profesora. Dejando poco a poco la habitación Diana no pudo evitar mirar de reojo a la castaña quien le devolvió la mirada con una ligera sonrisa, esto provoco que algo se removiera en su estómago generando que un ligero sonrojo se hiciera presente en sus mejillas haciendo que por acto reflejo le regresara la sonrisa antes de salir.

En el tiempo restante la enfermera se encargó de verificar la condición de Akko, sus signos vitales, sus heridas y como su cuerpo reaccionó a su tratamiento mágico, todo esto con la maestra Chariot en espera.

- ¿Como esta? ¿Se encuentra bien? - Chariot estaba ansiosa y quería saber rápido el estado de su alumna.

- Parece estar bien, demasiado bien para lo normal- Menciono más para si misma la enfermera.